Etiqueta: bomba

  • Poema de Joan Maragall tras la bomba del Liceo; recuerdos de Aureli Capmany

    Paternal

    Tornant del Liceu en la nit del 7 de novembre de 1893.

    Furient va esclatant l’odi per la terra,
    regalen sang les coll-torçades testes,
    i cal anar a les festes,
    amb pit ben esforçat, com a la guerra.

    A cada esclat mortal – la gent trèmola es gira:
    la crueltat que avança, – la por que s’enretira,
    se van partint el món…
    Mirant al fill que mama, – a la mare que sospira,
    el pare arruga el front.

    Pro l’infant innocent,
    que deixa, satisfet, la buidada mamella,
    se mira an ell, se mira an ella,
    i riu bàrbarament.

  • El último día de Santiago Salvador Franch, asesino del Liceo

    SPAIN’S SAD ANARCHIST
    Barcelona’s Murderer Retracts His Penitent Expressions
    WILL BE GARROTED THIS MORNING
    Franch Feigned Repentance Until His Last Hope of a Reprieve Had Gone – He Had Become a Franciscan Monk.

    BARCELONA, Nov. 20. – The Governor of the prison went this afternoon to the cell of Salvador Franch, the chief conspirator in the Lyceum Theatre outrage, and read to him his death warrant. Some time ago Franch declared his penitence and was admitted to a monastic order. Later he became as blasphemous as ever. Nevertheless, two priests had accompanied the Governor to offer the Anarchist consolation. One of them approached him immediately after the reading of the death warrant.

    «Hurrah for Anarch!» shouted Franch, stepping back.

    «But you declared your repentance and conversion to the true religion,» exclaimed the priest.

    «That was all nonsense,» replied Franch. «Now get away from me, and don’t show me your ugly features again.»

    Franch was taken to a cell near the place of execution and was chained to the wall. He fought so savagely that it required three guards to handle him. After soldiers had been placed on guard with fixed bayonets, the priest appealed to him again to confess.

    «I don’t need you; get away,» was the only response.

    Franch became calmer and talked to the guards concerning an execution of an Anarchist which he had witnessed. He also asked the Warden to explain the mechanism of the garrote. He said that he would face death bravely, adding that he did not care what was done with his body. he will be executed tomorrow morning.

  • Santiago Salvador Franch, asesino del Liceo, muere cantando

    GARROTED A CRAFTY ANARCHIST
    BARCELONA HAS EXECUTED SALVADOR FRANCH’S SENTENCE
    He Died Impenitent in Spite of His Former Protestations of Piety – Mob Jeered at His Body.

    BARCELONA, Nov. 21. – Salvador Franch, the chief conspirator in the death of thirty persons and the wounding of eighty others in the Lyceum Theatre in this city a little more than a year ago, was executed here at 8:06 o’clock this morning.

    […]

    The prisoner throughout the last day and night of his life showed no fear. His meals were eaten with a good appetite and apparently were heartily relished. At 8 o’clock last evening his wife and daughter were admitted to his presence and spent considerable time in an endeavor to induce him to confess his crimes and accept the consolations of religion, saying: «If you don’t you will ruin us.»

    Franch angrily, and with the greatest excitement, refused to pay any heed to their appeals.

    It was several times found necessary for the military to charge upon and disperse the crowds which had collected about the prison in the hope of seeing the execution.

    Franch cried «Long live Anarchy!» as he was being led to the place of his execution, and scoffed at religion to ths last. A few minutes before he was put to death he began singing, and he continued his song until he was not able to utter a sound.

    His body was exposed in its place, in the death chair, until sundown. Great crowds of people gazed upon the distorted features of the dead man, and gloated over his execution, making all sorts of remarks of a character showing their detestation of the man.

  • Charles Arrow, el Sherlock Holmes barcelonés

    [P]ara los barceloneses este terna tiene un interés especialísimo, por cuanto nosotros tenemos también nuestro detective, en carne y hueso, inglés por añadidura, en el cual habíamos cifrado nuestras esperanzas para que aniquilase el terrorismo [anarquista] al estilo y modo del modelo de los detectives encarnado en el gran Sherlock Holmes.

    En efecto, un buen número de ciudadanos estaban firmemente persuadidos de que mister Arrow en cuanto llegase á esta capital inmediatamente se echaría á la calle, husmeando pistas; que una colilla de pitillo, ó una cinta de alpargata, ó una frustería cualquiera, recogida al azar, bastarían á su perspicacia de detective, para ir de deducción en deducción hasta desenredar la madeja, y en fin, que cualquier día, al desdoblar el periódico por la mañana, nuestros ojos tropezarían con la sensacional, aunque prevista noticia de que míster Arrow había logrado penetrar en un tugurio de Sans en el que estaba reunida toda la Plana Mayor del Terrorismo, que había apagado la luz, puesto su cigarro en una ventana para que la brasa sirviese de falsa guia á los sorprendidos, ganando él la puerta—todo conforme al ritual Sherlock Holmes—dejando á los malhechores enchiquerados. Mas, como nada de esto ha sucedido, ni es posible que suceda, de ahí el que aquellos buenos ciudadanos, que no son pocos, se consideren burlados, y hablen de nuestro de nuestro detective ¡poniéndole como diga dueñas!

  • Gran explosión, censura

    BOMB USED IN BARCELONA.
    Only Three Persons Injured — Strict Censorship of the Press.

    PARIS, Aug. 27.–Mail advices from Barcelona say that Thursday night an explosion which was heard for miles startled the city. It was that of a bomb which had been placed inside a public convenience station in the principal street of the city, and three persons were injured.

    The advices add that the censorship continues inexorable and that only a few of the older daily papers are appearing. Not one of these, however, makes mention of the explosion.

  • Matanza en el cabaret Pompeya

    Barcelona 13 a las 21’30.
    Explosión de una bomba
    Muertos y heridos
    Tempestad aérea y terrestre
    Barcelona.-Anoche se desató en esta ciudad una horrorosa tormenta.

    Soplaba recio el vendabal, llovía a cántaros y sucedíanse rápidamente los relámpagos y truenos.

    Cuando la tempestad arreciaba, en medio del fragor de la tormenta, estalló con horrísona detonación una bomba en el music hall «Pompeya».

    Creyeron en un principio los que en aquellas cercanías oyeron la explosión que allí había caído un rayo.

    La espantosa realidad

    A la detonación consiguiente al estallido de la bomba sucedieron en breve alaridos desgarradores, voces de angustia, ayes de dolor, gritos de espanto y de terror.
    Entonces las gentes se dieron cuenta de la tremenda realidad.

    Era que a las 12 y 27 minutos de la noche [es decir la madrugada del 13], durante un intermedio del espectáculo, cuando muchos concurrentes estaban fuera, hizo explosión una bomba colocada sobre una butaca.

    Cuadro espantoso

    Ante la realidad son pálidas cuantas descripciones se hagan del cuadro espantoso que ofrecía el «Pompeya» inmediatamente después del estallido.

    Los cascos de la bomba lo destrozaron todo e hirieron terriblemente a muchas personas.

    Sobrevino una desbandada general. Los espectadores huían alocados, despavoridos. Se precipitaban unos contra otros hasta formar montones de gente, verdaderos amasijos de carne humana en medio de un humo espeso y acre que a raíz de la explosión empezó a esparcirse por la sala.

    Era una visión espantosa la que ofrecía aquel local tan pronto la concurrencia se dió cuenta de la realidad.

    Muertos, heridos, destrozos

    Cuando fué posible proceder a investigaciones y reconocimientos fueron recogidos diez y nueve heridos y dos muertos.

    Un casco fué a dar contra la cañería conductora del agua y la rompió. El peligro de una inundación se sumó a tantos horrores.

    La sangre fluía abundante, formaba regueros, se encharcaba.

    En su desenfrenada carrera, presa del espanto, perdieron muchos el sombrero, alguna prenda de vestir, el bastón, etc. Otros perdieron las ropas con que se encubrían y que en su desesperación desgarraban o que les arrancaban a tirones los que pretendían adelantarles para huir.

    Los dos cadáveres halados en el salón no han sido hasta ahora identificados.

    Uno de los heridos ha fallecido en el Hospital de Santa Cruz. Otros dos agonizan.

    Entre los heridos figuran el periodista de Alicante don Federico García Gómez y dos compañeros.

    Diez minutos antes de producirse la explosión el barítono señor Ceballa y los maestros músicos Millán y Acevedo trataban de ir a un espectáculo.

    Después de titubear sobre si entrarían o no en el Pompeya, desistieron de este primer propósito y optaron por ir a otro cabaret de la calle del Conde del Asalto.

    Así eludieron el terrible peligro y los trastornos que implicaba ir a Pompeya.

    El artefacto explosivo

    La bomba estaba oculta debajo de una gorra con visera de charol. Estaba cargada con un potente explosivo que había de obrar como agente propulsor de los balines y trozos de hierro que rellenaban el infernal artefacto.

    Algunos vierno la mecha aplicada al explosivo, pero sin acertar a quitarla.

    Las autoridades creen que la mecha se encendió con un cigarrillo.

    Después de la catástrofe

    Entre el vecindario del Paralelo produjo la catástrofe del Pompeya una honda consternación general y fuertísimo enojo que transcendieron pronto a toda Barcelona.

    Los heridos son en su mayoría gentes humildes.

    Los autores de este infame atentado no han sido habidos, a pesar de que el Gobernador ha dejado entrever que está sobre una pista segura.

    El jefe del Gobierno señor Data ha condenado al atentado del Pompeya y ha dictado severísimas órdenes a las autoridades de Barcelona.

    Se ha hecho observar que uno de los heridos lo está en ambas manos, detalle que puede conducir a una pista.

    Resulta también extraño que el atentado se perpetrara precisamente en uno de los barrios más populares de Barcelona.

    El Subsecretario de Gobernación ha dicho que la policía busca a dos individuos que estuvieron en el salón Pompeya momentos antes de producirse la explosión.

    Protesta obrera

    La organización obrera de Cataluña ha publicado un manifiesto en el que protesta enérgicamente contra el atentado del salón Pompeya.

    Dice el documento que los obreros organizados están dispuestos a colaborar en cualquier acción que tienda a terminar con los crímenes llamados sociales y que prestarán poderosa ayuda al que quiera esclarecer este asunto tenebroso.

    Añade el manifiesto que se llegará a donde precise para patentízar la protesta y la indignación, invita a los obreros que dejen el trabajo el día del entierro de las víctimas del atentado del salón Pompeya.

    «Perseguimos (dice por último la manifestación de los obreros organizados de Cataluña) un ideal de justicia que no puede empañarse con la mancha de un crimen.»

    Firman el manifiesto protesta el comité de la federación local y los de las confederaciones regional y nacional.

    NOTICIAS VARIAS
    Huelgas, conflictos y agresiones
    Barcelona.-Se ha prohibido la celebración de un mitin sindical-socialista.

    El paro alcanza a setenta casas y el número de huelguistas asciende a mil setecientos.

    Ha fallecido el maquinista de La Publicidad que fué agredido recientemente.

    El entierro del linotipista Román se ha visto concurridísimo.

    El otro linotipísta mejora y lo mismo el administrador de la cárcel.

    Ha sido agredido y herido levemente el maestro barbero Francisco Martinez. El agresor es el dependiente Gonzalo Godino.

    En la calle del Asalto asestaron una puñalada en la región cervical al tenedor de libros don Félix Sánchez.

    El agresor huyó y no fué habido.

    Se espera una solución del pleito de teatros en el que interviene la Sociedad de Autores.

  • Bombardeo Plaza España, defenestración piano, saqueos posteriores

    Cuenta papá que las tropas de Franco se levantaron en Africa el 18 de julio. Al día siguiente una bomba los sacó de la cama. Su papá, el yayo José, fue a investigar a la luz de un día sin sol. «Quedaros tranquilos en casa, voy a ver qué ha pasado». Al volver, cuenta papá, el yayo José explicaba que jamás había visto tanta «carne en la calle». La Plaza España de Barcelona había sido bombardeada. Transeúntes, gente de a pie, los primeros obreros que esperaban el metro, inocentes todos: muertos. Bastó y sobró para que la familia se preparara para salir a la calle.

    Cuenta, ahora la historia, que el pueblo de Barcelona se enfrentó al ejército y lo venció. Un pueblo que se agrupaba alrededor del anarcosindicalismo. Las bravías teorías de Bakunin, Proudhon y Malatesta, eran anatema de las de Marx y Lenin. Los anarquistas no estaban ni con unos ni con otros. El primer frente, después de espantar al ejército, fueron las iglesias, conventos y colegios de curas y monjas. El clero temblaba y huía por los pasillos subterráneos.

    Cuenta papá que lo que vio aquellos días, cuando apenas era una adolescente, lo acompañó en sus recuerdos hasta el día de hoy. Papá vio como quemaban los cuadros y las esculturas de las iglesias. Como los gitanos de la calle Los Ladrilleros, en nombre del anarquismo lanzaban un piano de cola de alto balcón del convento de la calle Guadiana de Sans [es decir, el Colegio Sagrada Familia de las Hermanas de la Sagrada Familia de Urgel, ve por ejemplo Manuel García Gargallo, L’ensenyament de l’església a la ciutat de Barcelona, ahora parte de la Escola Joan Pelegrí]. La fuerte impresión de ver las monjas momificadas emparedadas en los subterráneos pasillos que comunicaban del convento al de los curas. «Monjas con sus fetos en brazos…».

    El escarnio esperpento de Valle-Inclan finalizaba en la Diagonal donde en desfile carnestolendo al grito de «a las barrricadas» proclamaba el triunfo de la Revolución. Camiones llenos de obreros, gitanos, chulos y todas «las putas del barrio chino» que se iban para el frente de Aragón. Así lo vio papá y así me lo ha contado una y otra vez. Después la historia comenzó a complicarse. Lo que pretendió ser un golpe de Estado militar se transformó en una guerra civil. Una apretada guerra mundial que sirvió de ensayo general para la gran guerra. La última guerra idealista del siglo de las guerras.