Las grandes poblaciones se desdeñan de parecerse á las de corto vecindario y aspiran siempre á obtener mayores prerogativas, lo cual trasciende á los ayuntamientos, representantes de las poblaciones grandes y chicas; y mientras unos tienen el tratamiento de Escelencia apenas se concede á otros el de Merced. Eso debe de estar muy puesto en el órden; pero al cabo no es mas que sancionar el principio de que el mas fuerte es el que mas vale. Tanta trascendencia tiene este amor propio de las grandes poblaciones que pasa de tejas arriba, y asi vemos que el patron de una aldea es mas agasajado en su dia por los aldeanos, que el patron de una capital por sus patrocinados. No pareceria bien que los ciudadanos (esto es los vecinos de una ciudad) se entregaran al regocijo y celebrasen la fiesta de su patron con esas bicocas con que se divierte el labriego. Los gigantones, la tarasca y esos bailes, reminiscencias de los antiguos misterios que se celebraban en las iglesias, rebajarian el carácter de ciudad: eso se deja para los villorrios.
Con efecto, Barcelona, la corte de los antiguos condes, emporio de la corona de Aragon, capital del antiguo principado de Cataluña y ahora de la provincia de su nombre, Barcelona no se separa de sus tareas en el dia de hoy, mientras la Iglesia celebra las glorias de Sta. Eulalia patrona de la ciudad. En la Catedral se venera el cuerpo de la santa en la capilla situada en la cripta debajo del altar mayor, y se le tributan solemnes cultos con oficio cantado por la música de la capilla, y sermon, á los que asiste el cuerpo municipal. Despues del oficio se lleva la imágen de la santa en procesion por las calles inmediatas á la iglesia, y por la tarde se canta rosario, concluyendo la funcion con los gozos de la santa.
El baile público que por la noche tiene lugar en el salon de la lonja es el único estraordinario con que se solaza la grave ciudad en el dia de su patrona. ¡Cuán distinta es esta seriedad de la alegría que reina en cualquiera otro pueblo de la provincia en el dia de la fiesta mayor! porque sí, señores mios, sin rebajarles á Vds. un punto de su categoria, el dia de Sta. Eulalia es la FIESTA MAYOR de Barcelona. Nunca mejor que en este dia puede notarse la diferencia y hacerse la debida comparacion, yendo al vecino pueblo de Sarriá donde tambien es fiesta mayor y se celebra la del santo del dia. Aquellos vecinos dan treguas á sus tareas diarias y hay funcion en la parroquia, y procesion, y bailes en salones y entoldados, esmerándose los socios en el adorno de ellos, y en una palabra, despues de la funcion religiosa bailan hasta que vuelve Dios á amanecer. Allí acuden muchas payesas del llano elegantizadas con sus graciosos trages. El que quiera gozar de tan buena compañía y echarles cuatro piropos y ser bien recibido, tire el gaban, vista chaqueta y zarandéese por la módica cantidad de un real de vellon en esas tartanas que hallará fuera de la puerta del Angel. Una táctica es preciso usar, y en su secreto estamos nosotros, y no hemos de descubrirlo á nadie sino á nuestros suscriptores machos (es decir varones) en muestra de gratitud; cuidado con divulgar el secreto!
No insinuarse á exabruptos: mucha dulzura, mucha amabilidad, sufrir desaires, mas volver á la carga: sentir reproches, mas no atufarse; y cualquier jóven del buen tono puede estar seguro…..de tener que volver en el mismo carruage en que fue.
Juan Cortada, José de Manjarrés, Josefina Roma, El libro verde de Barcelona. Añalejo de costumbres populares, fiestas religiosas y profanas, usos familiares, efemérides de los sucesos mas notables acaecidos en Barcelona (1848).