Etiqueta: Alfonso XIII de España

  • Llega una «tribu» africana desde Marsella

    Aunque el sol achicharraba de lo lindo, fue numeroso el público que acudió á presenciar, á las once y media …, al desembarque de los negros aschantis, que procedentes de Marsella ha conducido el vapor «Nuevo Extremadura».

    Una barcaza remolcada por varias lanchas, en la que ondeaba la bandera de la colonia inglesa de Costa de Oro, llevó á tierra á los negros, quienes ocuparon de cuatro en cuatro los carruajes descubiertos preparados al afecto.

    En el último coche iban la esposa del director propietario y el jefe de la tribo, luciendo la primera un sinnúmero de joyas. Un lujoso parasol encarnado con flecos de oro, sostenido por un negro tentado en la tratera dei coche, cubría á los viajeros.

    En el carruaje que precedía al descrito iban los maceros con los símbolos reales, consistentes en un bastón cuyo puño figuraba una mano de marfil, dos alfanjes y una especia de capillo curvo hecho con pelo de caballo.

    Son gente de alta estatura, hercúleas formas y rizados cabellos, siendo sencilla su indumentaria, que consiste en un delantillo y una túnica de colores verde ó azul, con la que envuelven la mitad del cuerpo, arrollándole debajo del brazo contrario. Algunos usan sandalias.

    Abundan los niños y las mujeres.

    La aparatosa comitiva recorrió parta da la ciudad, para dirigirse al local de la Ronda de la Universidad, donde están instalados, llamando la atención da los transeuntes, por el aspecto pintoresco que ofrecía la cabalgata.

    La inauguración de los villórios negros tendrá lugar hoy, á las cuatro de la tarde, en el local indicado.

  • Exposición del «pueblo negro» en la Ronda de la Universidad

    Los Aschantis
    Pueblo negro, 150 indivíduos.–Abierto de día y de noche.–Ronda de la Universidad, 35.–Entrada 1 peseta, los jueves día de moda, entrada 2 pesetas.

  • Exhibición de una «tribu de Aschantis» en el día de Inocentes

    Noticias de espectáculos
    ELDORADO.—Del programa de la funciónde Inocentes que se verificará esta noche, forman parte «La Viejecita», con sorpresas en su cuadro segundo; «Lo pessebre de don Pau», capricho cómico del señor Molas y Cosas, que todos los años tiene aplausos en semejante cita; exhibición de una tribu de «Aschantis»; un baile grotesco de aparato y otras excentricidades: «El bigote rubio», «Agua, azucarillos y aguardiente» y el cuadro primero de «La Viejecita» serán representados con la formalidad de los demás días.

  • Disturbios bajo bandera francesa

    SPANISH TOWNS DISTURBED.

    French Admiral’s Presence at Barcelona Occasions a Demonstration — Riots in Other Places.

    BARCELONA, July 20.–There was a serious demonstration here to-day. A mob of about 800 persons seized the opportunity afforded by the presence of the French Admiral Fournier at an official luncheon to parade the streets carrying the French tricolor and shouting seditious cries.

    The crowd was dispersed by the police after some trouble, and a number of arrests were made.

  • Ataque militar contra las oficinas del ¡Cu-Cut! y La Veu de Catalunya

    En 1905 la Lliga volvió a perder las elecciones provinciales, aunque en este negro panorama le aportaron cierto consuelo unas elecciones municipales en otoño. Para celebrarlo, el partido convocó el 18 de noviembre un «banquete de la victoria». Sacó punta al suceso el semanario satírico nacionalista Cu-cut!, en un chiste: un militar comentaba el cartel del banquete: «¿Victoria? Eso será cosa de paisanos.» Las pullas y desprecios al ejército menudeaban desde el 98, pero esta ocasión fue para muchos militares la gota que colma el vaso, máxime viniendo de quienes en el 98 habían laborado en la retaguardia contra el esfuerzo bélico. Grupos de oficiales asaltaron los locales de la Cu-cut y los de La Veu de Catalunya, y destrozaron sus enseres.

    Aquel coletazo del 98, en principio traumático, se transformó para los nacionalistas en lluvia copiosa después de una sequía, inaugurando una época de esplendor para ellos.

    El escándolo por el asalto a Cu-cut tomó proporciones gigantescas. Todos los partidos en Cataluña, desde los carlistas a los republicanos, así como la prensa, se solidarizaron con la Lliga, poniendo al rojo vivo a la opinión pública. En Madrid la irritación con la literatura nacionalista creó el ambiente contrario. También allí había un fuerte rechazo a la acción de los militares, pero la indignación de éstos era tal que ningún gobierno tuvo ánimos para afrontarla. El entonces jefe de gobierno, Montero Ríos, dimitió, y su sucesor Moret, que había acordado con Cambó cortar la indisciplina castrense, aceptó la «Ley de jurisdicciones,» por la cual los delitos contra la patria y el ejército pasaban al ámbito militar. Esa ley suponía un grave retroceso, pues la Restauración había superado la intromisión del ejército en la política, pero en buena medida era tambíén el fruto de una imprudente e incesante provocación a las fuerzas armadas, las cuales se sentían impotentes y desprotegidas por los políticos.

  • Salen por primera vez a la calle agentes de la Guardia Urbana

    En 1906 el cuerpo de la Guardia Municipal estaba totalmente desorganizado y en plena decadencia. De los 850 componentes de la plantilla, era muy reducido el número de los que hacían servicio en la vía pública.

    Las disposiciones legales anticuadas, pero vigentes, impedían a los Ayuntamientos jubilar las fuerzas armadas -la Guardia Municipal tenía carácter militar- y el Alcalde no quería decretar el cese de los componentes que no estaban en condiciones de prestar servicio por razones de humanidad. Este hecho impedía la renovación de la Guardia y era la causa principal de su desorganización y el primer motivo de su decadencia.

    De los 850 municipales, se desarmaron a 200. Este hecho los ponía en condiciones de derechos pasivos, dejaban de depender del Alcalde y pasaban a ser funcionarios municipales con todos los derechos que el Ayuntamiento les tenia reservados. Con esta medida se consiguió la renovación por personal de la guardia municipal

    Esta transformación no gustó a la autoridad gobernativa. El desarme de los guardias privaba al Gobernador civil, de acuerdo con el Alcalde, de utilizar un contingente armado en momentos críticos de alteración del orden público.

    Con el derribo de la muralla y el crecimiento constante se produjo un aumento significativo en la circulación de vehículos. El problema del tráfico fue detectado por el Alcalde Sanllehy el 1907 y para tratar de solucionarlo creó el Cuerpo de la Guardia Urbana.

    En sesión de 19 de febrero de 1907 fue aprobado el Dictamen de la Comisión de Gobernación que proponía la creación de la Guardia Urbana con dependencia directa del Ayuntamiento en su nombramiento y en la dirección de su gestión. La Guardia Municipal continuó, en estos aspectos, dependiendo directamente de la alcaldía.

    La Guardia Urbana comenzó a prestar servicio con una dotación de 25 guardias el día 8 de diciembre de 1907 y su aparición fue recibida con fuertes aplausos. Domingo J Sanllehy era el Alcalde de la ciudad.

    El primer contingente organizado del cuerpo de la Guardia Urbana se constituyó con 196 guardias, un jefe, dos oficiales y dos auxiliares.

    La misión de este cuerpo superaba la simple regulación del tráfico y se ampliaba con actuaciones de policía cívica.

    En el reglamento de su creación decía: «Deberá conservar cuidadosamente el estado de los servicios públicos en su zona, dando cuenta inmediatamente de cualquier deficiencia o particularidad que observara en el pavimento, farolas, arbolado, aceras, es decir, cuantos servicios hacen referencia a la vía publica». Más que vigilarlo, la Guardia Urbana tenía que servir al ciudadano.

    El 1910 la sección montada de la Guardia Urbana celebró la primera representación del Carrusel con motivo de la visita a Barcelona del rey Alfonso XIII.

  • Otro rey borbón empieza quizá el peor ataque nunca contra la Barcelona antigua: la construcción de la vía Layetana

    D. ALFONSO XIII EN BARCELONA

    No anduvimos, equivocados en nuestros augurios de ayer. La llegada del Rey á Barcelona vino á desvanecer en un momento todas las inquietudes que se habían empeñado en esparcir los que se aprovechan de cualquier ocasión para cultivar la nota sensacional y mantener sobre esta ciudad la atmósfera del terrorismo.

    Llegó el Jefe del Estado, llegó el señor Maura; y el vecindario de Barcelona les recibió con la más afectuosa cortesía, esforzándose iodos para que ese acto, que había atraído las miradas del mundo entero, sirviese de rotunda rectificación á las profecías que con tanta persistencia se venían propalando. En honor de la verdad hay que hacer constar que á ese resultado contribuyeron todos los elementos, sin discrepancia alguna, cada cual dentro de la norma que sus respectivas convicciones les imponían: de adhesión en unos, de correcto acatamiento en otros, de respetuosa abstención en aquellos que rinden culto al ideal republicano.

    Lo que resultó inequívoco y no puede ser falsificado en manera alguna es el general deseo de que ninguna nota desagradable turbara la solemnidad de la recepción ni el júbilo de.Barcelona,; por el comienzo de su reforma. En este anhelo se unieron todos los barceloneses, por encima d esus compromisos de consecuencia y de partido. Y á la fuerza activa del sentimiento dinástico en quienes lo tienen firme y arraigado, se sumó la compostura, irreprochable de todos los demás y aun la curiosidad activa que comunicó al día de ayer un aspecto á la vez animado y solemne.

    Nos congratulamos, pues, del espectáculo que ayer ofreció Barcelona y de que el Rey, el gobierno y los representantes de naciones amigas pudieran presenciarlo como desquite de los presagios, calumniosos para esta, población, en nombre de los cuales se combatía el viaje del monarca. Y ahora pasemos á reseñar la memorable jornada.

    [blabla

    En la iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes:]

    La iglesia se hallaba iluminada y adornada con ricos tapices. El templo estaba lleno de invitados.

    A las nuevo y cuarenta y cineo minutos los vivas y aplausos de la muchedumbre y un repique de campanas anunciaban la proximidad de la comitiva regia á la iglesia.

    Al descender del coche Don Alfonso, el órgano dejó oír sus armoniosos acordes, y el Rey colocóse bajo el palio, á la derecha del cardenal doctor Casafias, quien iba revestido do capa pluvial, y acompañados del clero y de algunos nobles, fueran hasta el altar mayor, subiendo al presbiterio, además del monarca y el clero, el presidente del Consejo de ministros, el ministro de Marina, el alcalde, el gobernador civil, el duque de Sotomayor, el general Pacheco, el conde de Grave, el conde del Serrallo y el marqués de Marianao y su hijo.

    Poco después llegaron, y subieron también al presbiterio, el embajador de Austria en España y el almirante de la escuadra austríaca.

    El Rey colocóse bajo un trono que se había levautado al lado del Evangelio. Cerca de él colocáronse los señores mencionados.

    El cardenal doctor Casañas entonó el «Te-Deum», que fue cantado por la capilla de música del maestro Millet.

    Terminado el «Te-Deum», el cardenal concedió 200 días de indulgencia á cuantos habían asistido a aquel religioso aeto.

    A continuación cantóse la Salve, de Aichinger.

    Después S. M. subió al camarín, en dónde le recibieron las camaristas de la Virgen de las Mercedes, señoras condesa de Sicars, marquesa viuda de Llobet, doña Teresa Poch, viuda de Martorell; doña Rita Coll de Suñer y el capellán custodio doctor don Amadeo Pujol.

    El Rey y los que le acompañaban oraron breves momentos ante la imagen de la Virgen y la adoraron.

    Después de la adoración le enseñaron al Rey el chaleco manchado de sangre que el señor Maura llevaba al ser herido cerca de la Merced en 1904, cuya prenda ofreció el señor Maura á la Virgen, y se halla colocada en una vitrina.

    Al verlo el presidente del Consejo, exclamó: «Eso ya ha prescrito».

    […]

    La inauguración de la reforma

    Desde mucho antes de la hora designada para la inauguración de las obras de la reforma, con objeto de evitar el acceso del público por la calle Ancha a la de la Reina Regente, estacionáronse en loa cruces de los dos callejones situados antes y después de la misma, parejas de la guardia municipal montada y de á pie, que impidieron el tránsito por dicho trayecto.

    Las mismas precauciones se adoptaron á la entrada de la calle de la Reina Regenta por la del Consulado.

    Las tribunas, que eran cinco, hallábanse instaladas en el trozo abierto de la calle de la Reina Regente, comprendido entre la Ancha y la del Consulado.

    A la derecha, entrando por la calle Ancha, alzábanse primero la tribuna regia y al lado la de las autoridades; á la izquierda otras dos destinadas á los invitados, y un poco más baja, y frente á la real, la reservada para los periodistas.

    En el cruce de la calle de la Reina Regente con la del Consulado veíanse dos mástiles con gallardetes, y frente á la casa núm. 71 de la calle Ancha, propiedad del marqués de Monistrol, con cuyo derribo habían de inaugurarse las obras de reforma, otros dos rematados por gallardetes que sostenían un cartelón encuadrado por una guirnalda de follaje, donde se leía: «calle da la Reina Regente», y en los que se destacaban otros dos cartelones con los nombres do Cerdá y Baxeras, autor uno del proyecto de Ensanche y el otro del de Reforma interior, y á quienes puede considerarse como propulsores del desarrollo de Barcelona.

    De los referidos carteles pendían cintas blancas y amarillas y el pie de los mástiles hallábase cubierto eon hojas de palma. Tres pendones, dos con el escudo de Barcelona, y el tercero, que ocupaba el centro, con los colores de la bandera española, colgaban de la cornisa del edificio citado, y los balcones del piso principal y del entresuelo se hallaban adornados con colgaduras.

    […]

    Distribuidas en el trayecto de la calle de la Reina Regente hallábanse la banda municipal, las de los Talleres Salesianos, Casa de Caridad, Asilo Naval y la del regimiento infantería de Alcántara.

    A la llegada del cardenal-obispo de la diócesis, que acompañado de sus familiares entró por la calle Ancha, resonaron algunos aplausos.

    Después del cardenal, á las once y media, llegó el Ayuntamiento en corporación representado por el alcalde y los concejales señores Puig y Alfonso, Rovira, Rogent, Rahola, Fuster, Sagarra, Cararach, Peris, Durán, Pia y Deniel, Rubió, Cardellach, el secretario señor Gómez del Castillo y el senador don Raimundo de Abadal, que fué uno de los ponentes del contrato de reforma.

    Llegada del Rey

    A las doce y diez minutos los acordes de la Marcha Real ejecutada por las bandas de música y las aclamaciones del público anunciaron la llegada del Rey.

    Desde las tribunas y desde las ventanas, balcones y azoteas de las casas que dominan la calle de la Reina Regente, el público, en el cual predominaban las señoras, agitaba sin cesar los pañuelos, vitoreando á Don Alfonso, quien de pie en el coche y saludando militarmente, agradecía las muestras de afecto de la multitud.

    Inmediatamente el alcalde, al frente de la representación del Ayuntamiento, adelantóse hasta la calle del Consulado á recibir ai Rey, á quien dirigió una breve salutación, correspondiendo Don Alfonso en términos por demás afectuosos.

    El Monarca estrechó efusivamente la mano del señor Sanllehy y de cada uno de los concejales que componían la representación del Ayuntamiento y acompañado de ellos y de la Diputación provincial se dirigió á la tribuna entre los aplausos del público.

    Don Alfonso, en cuyo semblante reflejábase viva satisfacción por la acogida calurosa de que era objeto, ocupó lá presidencia, sentándose á la derecha de él el señor Maura con uniforme de gala y el cardenal doctor Casañas, y á la izquierda el ministro de Marina, de uniforme también, y el alcalde señor Sanllehy, quien ostentaba la banda y cruz de Isabel la Católica.

    Detrás del monarca, á derecha é izquierda del sillón por él ocupado, veíanse al duque de Sotomayor y al general Echagüe.

    Además de las primeras autoridades ocupaban la tribuna regia el Ayuntamiento, la Diputación provincial, los diputados á Cortes por Barcelona señores Cambó y Puig y Cadafalch, el marqués dé Comillas, en representación del Banco Hispano-Golonial, y otras significadas personalidades.

    Preliminares

    Empezó el acto con la lectura, por el secretario del Ayuntamiento, señor Gomes del Castillo, de los extractos del acuerdo del Ayuntamiento, fecha 28 de marzo de 1907, aprobatorio del contrato de reforma interior, del presupuesto extraordinario para la realización del proyecto y emisión de los bonos de Reforma, de la real orden de 23 de julio último aprobando el contrato, y del acuerdo adoptado por el Ayuntamiento en 20 de febrero próximo pasado, en virtud del cual se autorizó al alcalde para señalar el día de la inauguración de las obras.

    Habla el alcalde

    Después de ia lectura de los aludidos acuerdos, se levantó el señor Sanllehy, pronunciando el siguiente discurso:

    «Señor.—Señores:

    Habéis demostrado, Señor, gran interés en venir á honrar un acto que es el más intenso de la vida municipal de nuestra ciudad; debemos mostraros nuestro más sincero y profundo agradecimiento.

    La grandiosa obra de la reforma de la Barcelona antigua, de la que aún no hace cuarenta años era por sí solo toda la ciudad, es una obra de gran empuje, sin precedentes en otras ciudades que, no siendo capitales, no han podido contar, como en esta, con el auxilio del Estado.

    El Ayuntamiento ha consagrado su inteligencia y actividad en elaborar esta gran obra, con trabajos incesantes por largo espacio de tiempo, y un Banco esencialmente catalán, el Banco Hispano Colonial, se ha sentido arrastrado por el amor á la ciudad y ha venido en auxilio del Ayuntamiento.

    En la elaboración de este convenio con dicho Banco, han tomado parte todos los concejales en distintas comisiones, los actuales y los que han dejado de serlo, lo mismo que mis ilustres predecesores, y han sido la ponencia y alma del mismo, Abadal, aquí presente, antes concejal y hoy Senador, y Bastardas, que forma aun parte de nuestra corporación municipal, y que tengo el sentimiento de que no esté aquí hoy entre nosotros.

    Este convenio constituye por sí solo un monumento de estudio y de previsión, y tengo la seguridad que será en el porvenir un documento histórico que honrará la vida municipal de nuestros días.

    Dentro breves momentos va á empezar el derribo de seis casas, con activa rapidez seguirán otras cuatrocientas más, que será necesario derribar para usar esta primera vía, denominada hasta ahora por nosotros sólo con el nombre de vía A.

    Confiamos, Señor, con viva y legítima esperanza, fundados en la vida intensiva de nuestra ciudad, que á esta vía seguirán las demás, y que en plazo relativamente breve surgirán esas nuevas grandes vías proyectadas, como ha surgido, sin apenas habernos dado cuenta, y en el espacio de poco más de treinta años, nuestro extenso y grandioso Ensanche, como surge hoy casi por encanto la agregación de hecho de los pueblos vecinos, que al unirse á la urbe madre, vienen en su conjunto á constituir nuestra hermosa gran ciudad.

    ¡Conciutadans, visca Barcelona!

    ¡Visca el Rey!»

    Los vivas fueron contestados con entusiasmo por el público.

    El Rey y el presidente del Consejo de ministros escucharon atentamente el discurso del señor Sanllehy, haciendo señales de aprobación en los párrafos más culminantes del mismo.

    El señor Maura

    El presidente del Consejo contestó al señor Sanllehy con breves y elocuentes palabras.

    Empezó diciendo que, al igual del árbol pletórico de savia que echa nuevos y vigorosos brotes y rompe en rica y abundante eflorescencia, Barcelona, que está llena de vida, necesita realizar su reforma, sustituyendo por grandes vías las calles estrechas de la ciudad antigua.

    Añadió que actos como el que se estaba celebrando son de aquéllos que siempre se presencian con júbilo, y acabó diciendo que el Rey ha venido á Barcelona para asociarse con amor y orgullo, él y el gobierno, á esta gran obra de la reforma interior, que representa el engrandecimiento de la ciudad.

    La ceremonia

    Después del discurso del señor Maura, el Rey, acompañado del presidente del Consejo de ministros, del alcalde y demás autoridades, dirigióse á la casa número 71. Allí el señor Sanllehy le hizo entrega de una piqueta y una palanqueta.

    Las referidas herramientas han sido construidas en los talleres municipales, y son de acero empavonado; la piqueta tiene un mango de madera de acacia y en la parte metáliea aparece incrustada en oro la siguiente inscripción:

    «Reforma interior de Barcelona, inaugurada por S. M. Don Alfonso XIII en 10 de marzo de 1908.»

    Una vez abiertas las puertas del edificio, el Ayuntamiento tomó posesión de él y Don Alfonso derribó una de las piedras del portal, que había sido previamente socavada.

    Seguidamente el monarca, el señor Maura, el alcalde y demás autoridades firmaron el acta de la ceremonia que extendió el secretario dei Ayuntamiento.

    La pluma con que firmó el Rey es de oro, elevándose su coste á 510 pesetas.

    Mientras se firmaba el acta desfilaron ante la tribuna regia los operarios de las seis brigadas municipales, precedida cada una de ellas por un individuo que llevaba un cartelón con el nombre de la calle y el número de la casa cuyo derribo empezó ayer, y que son las seis que á continuación se expresan: Ancha, 71 y 77; Jupí, 14; Arco de Isern, 3; Manresa, 2, y Basea, 11.

    Acompañaban a las brigadas, compuestas de veinte operarios cada una, dos carros, una reproducción de los antiguamente llamados de carreras, del que tiraban seis mulas con jacces de seda y oro, y guiado por un mayoral y un postillón con los trajes de aquel tiempo, y el otro una tartana, con la caja y el costillaje del toldo cubiertos de flores y follaje, formando caprichosos y originales dibujos. Atado á la caja del primero, iba un mastín. Los citados vehículos conducían las herramientas destinadas á los obreros, que ayer mismo empezaron su tarea de derribo.

    Durante el desfile la banda municipal interpretó la marcha de Don Juan II.

    A la una menos cuarto, terminada la ceremonia, retiróse el Rey, con el señor Maura y sus acompañantes, dirigiéndose á la Capitanía general entre los aplausos del público.

    Don Alfonso y el señor Maura, mientras se verificaba el desfile de las brigadas, conversaron con los señores Cambó y Puig y Cadafalch.

    Los asistentes

    La Diputación provincial se hallaba representada en el acto por los señores Sostres, Albó, Torres Picornell, Lluch, Bartrina, Moret, Coderch, Badía y Andreu, Rafols y Roca.

    Asistieron además una nutrida representación del cuerpo consular, el arquitecto municipal señor Falques, y su ayudante señor Steva; la Junta del Banco Hispana Colonial, representada por los señores Güell Bacigalupi, Arnús, Fontanals y Estruch, y los arquitectos de dicha entidad señores Bassegoda, Sagnier y Sentmanat; el presidente del Fomento de Obras y Construcciones, sociedad encargada de las obras de derribo y urbanización de la sección primera de la granvía A, señor Viñamata, el gerente señor Piera y los consejeros señores Cortinas, Mas y Torres, el ingeniero de aquélla señor Sojo, el ex-ministro de Marina señor Goncas, el magistrado señor Cereceda y los señores Vidal y Ribas, Maristany, Gríera, Boladeres, marqués de Marianao, de Alella y Sentmenat, Ferrer y Vidal, Maristany, Rahola (don Federico), Espinós, Castellar, Elias de Molina, conde de Torroella de Montgrí, Milá y Pi, Milá y Camps, Fontcuberta y el notario señor Martí Beya que autorizó la escritura de compraventa de la casa que perteneció al marqués de Monistrol.

    Los duques de Tobar y de Arión, que han venido a Barcelona con los periodistas encargados de la información del viaje regio, asistieron también al acto, y confundidos con el público veíanse algunos voluntarios de la guerra de Africa luciendo sus típicas uniformes.

    Dos noticias

    El Ayuntamiento, al regresar á las Casas Consistoriales, después del acto de inauguración de la reforma, fue aplaudido varias veces durante el trayeeto.

    —Para celebrar el acto de ayer, los concejales obsequiarán próximamente con un banquete en la «Maison Dorée» al alcalde y al senador señor Abadal.

  • «Carnicería y conflagración» después de la huelga de Solidaridad Obrera

    WOMEN FIGHT SAVAGELY.

    Witnesses Describe Scenes of Carnage and Conflagration in Barcelona.

    CERBERE, France, July 30. — The first direct dispatch from Barcelona since the fighting began there reached this place to-day, and is without date. It says:

    «Barcelona has been a perfect hell. Half the population is terrorized, and the other half is mad with blood. The troops of the garrison, amid shouts of approval from the mob, repeatedly refused to fire on the people, and the work of repression fell upon the police and civil guard. They charged the revolutionaries and used their firearms freely everywhere, but numbers were against them. As this dispatch is sent the streets are in possession of the barricaded insurgents. The destruction of property has been great. Barcelona is completely isolated and running short of food.»

    Exactly what stage of the proceedings this dispatch covers it is impossible to say.

    The officers of the steamer Scutari arriving at Marseilles to-day from Barcelona, which port they left Wednesday afternoon, say the collision between the troops and the rioters began on Monday morning immediately after the declaration of a general strike. The rioters tore up the pavements and built barricades behind which they fought desperately. The troops and civil guard took many of the barriers by assault, and by night had brought about some semblance of order. Rigorous orders were issued by the authorities, the people being instructed to remain in their homes on penalty of being shot on sight after dark.

    On Tuesday morning, the Scutari’s officers say, the streets were filled with cavalry, infantry, and artillery, who gradually cleared the principal streets and squares, notably the Rambla Santa Monica and [Plaza de Cataluña], placing the batteries and machine guns so as to command the adjacent streets. The loss of life during these operations was heavy. The rioters, as they were driven back, built new barricades as fast as the old ones were captured, and entrenched themselves in the suburbs of San Andre, San Antonio, [Badalona], and elsewhere, holding the troops at bay in spite of the raking fire of the artillery.

    Everywhere flames broke out from churches, convents, and factories, and the skies at night were scarlet with the reflections of the fires. During Tuesday night the rattle of musketry, the drumming of machine guns, and the booming of cannon were ceaseless, and fierce fighting was in progress when the Scutari sailed.

    All Convents Burned But One.

    Passengers just arrived at Cerbere from Gerona, who went to San Felice from Barcelona by sea and then on foot to Gerona, where they took passage on a train, say the revolution was in full swing when the left the City of Barcelona. The «House of the People,» the headquarters of the rioters, was razed to the ground by artillery, and all of the convents except one in Calle Caspe, which was defended by Jesuits and a civil guard, were burned.

    The Montjuich forts bombarded the Rambla and the Paseos. Ten thousand revolutionists were daily fighting in the streets under the direction of a Revolutionary Committee, which had charge of the movement. The Caldos Bridge was blown up by dynamite. At Lesomatin an armed civil body had thrown its fortunes with the revolutionaries and was holding the troops and civil guards at Barcelona.

    From other towns on the Franco-Spanish frontier come many reports confirming what has been said of the terrible fury of the women throughout Catalonia. At Barcelona they fought behind the barricades with the men, urging them to fight to the death. Everywhere they resisted searches by gendarmes for recruits for the reserves, barring the doors of their houses and firing at the soldiers from the windows.

  • Una matanza por el ejército acaba con la revolución en Barcelona; rumores sobre el futuro de Maura; la implicación de Lerroux en la revolución

    RIOTERS REPORTED CRUSHED.
    Principal Bands Rounded Up in Barcelona and Killed or Captured.

    MADRID, July 29. — It was officially announced to-night that the cavalry engaged at Barcelona succeeded in driving into St. Martin Square the principal bands of revolutionists, against whom the artillery opened fire, causing great losses. The survivors surrendered.

    The official statement further says that it now remains only to master small groups of revolutionists in the villages in the vicinity of Barcelona.

    Thus, according to official advices, the insurrection has been checked, but at a great sacrifice of life. After fighting desperately and successfully for a long time behind barricades the principal mobs were gradually driven to St. Martin’s Square, where they found themselves entrapped.

    Heavy detachments of artillery and cavalry came up and surrounded them. The artillery opened fire, mowing down the revolutionists, who sought to escape, but were met at every point with shot and shell.

    Those of the insurgents who were not killed or seriously wounded threw down their arms and surrendered.

    The insurrection continues in the neighbouring villages, where the troops are proceeding. The commanders of the soldiers are under orders to spare none who attempts to resist.

    New from Barcelona, the centre of the revolutionary outbreaks, is exceedingly meagre and unsatisfactory. From refugees at Lisbon comes the report that the revolutionists are using bombs and that 100 persons were killed and 200 wounded during the earlier stages of the conflicts.

    Premier Maura announced to-night that he had received more favorable reports from Barcelona, where the situation, according to this official statement, is slightly ameliorated.

    «The arrival of reinforcements,» said the Premier, «will permit the repression of outbreaks.»

    Throughout the day, however, advices received from various quarters indicated that the disturbances in Catalonia were quite as serious yesterday, although the Government has succeeded in getting troops through to certain of the disaffected points. The lines of communication, which had been cut everywhere in Catalonia, have in part been repaired.

    Premier Maura May Resign

    The report that a provisional Government has been established at Barcelona and that the civil Governor has been assassinated is unconfirmed, but rumors are persistent that Premier Maura will resign and that a military dictatorship will be set up in Madrid. However, reports that King Alfonso would form a military Cabinet, presided over by Gen. Weyler, are officially denied.

    [Situación malísima en Marruecos, movilización general del ejército, posición de las finanzas del estado]

    Señor Lacierva, the Minister of the Interior, announced to-day that any newspaper printing reports disagreeing with official information would be prosecuted and its editions suppressed. Since the declaration of martial law throughout Spain yesterday, the censorship over news has been more severe.

    PARIS, July 29. – […]
    Advices received at Hendaye from a conservative and exceptionally well-informed source in Madrid depicts the situation, both exterior and interior, as being more critical than at any time since the Cuban war.

    Although the Spanish Government seeks to create the impression that the movement in Catalonia is anarchistic and simply a protest against the war in Morocco and the policy of Premier Maura, there are the gravest reasons for believing that it is a general and widespread revolutionary outbreak, which a combination of Republicans and Social-Revolutionaries have been secretly and effectively preparing for a long time.

    A dispatch to the Journal from Madrid says that the revolution at Barcelona, it is alleged, was arranged by former Deputy Leroux, chief of the Republicans at Barcelona, who returned recently to Spain from Buenos Ayres.

  • Atentado del lerrouxista Manuel Possá Roca, alentado por Pablo Iglesias, contra Antonio Maura, ex presidente del Consejo de Ministros

    ATTEMPTED MURDER
    SEÑOR MAURA FIRED AT
    ASSAILANT ARRESTED
    By Telegraph. – Press Association. – Copyright
    MADRID, 23rd July.

    As Señor Maura, ex-Premier of Spain, alighted from a train at Barcelona, a man fired twice at him. He was wounded in the arm and leg. A third bullet struck Señor Maura’s friend and wounded him seriously.

    The assailant was caught.

    OUTRAGE ATTRIBUTED TO REVENGE
    A DESPERATE YOUTH
    MADRID, 24th July.

    His wife and other relations accompanied Señor Maura. The latter’s lady cousin, after a second shot, seized the assailant and a carrier named Roca, aged eighteen.

    The outrage is attributed to revenge for Señor Maura’s severe suppression of the insurgents last year.

    ROCA’S DECLARATION.
    HE ACTED SPONTANEOUSLY.
    CRIME HAD ANARCHIST ORIGIN. (Received July 25, 10 a.m.)
    MADRID, 24th July.

    Roca declares that he acted spontaneously, that he had no accomplices, and that he does not belong to a secret Society.

    A search of his domicile shows that the crime was of Anarchist origin. Señor Iglesias, a Socialist, during a recent debate in the Chamber of Deputies concerning repression measures in Barcelona, raised a storm of indignation by remarking that an attack on Señor Maura’s person would be admissible, it necessary, to prevent his return to power.

    Señor Canalejas sternly protested against, such incitations, adding that the Government would enforce the law with a heavy hand.

    Señor Canalejas, the Premier, yesterday referred to that incident. He scathingly denounced Roca’s cowardly act, and eulogised Señor Maura’s selfsacrifice while in office.

    There were loud cheers, except from the Republican side.

  • Distanciándose de la ciudad progresista de Cerdá, la revista «Cataluña» propone la creación de un Barrio Gótico como modificación de la Reforma Interior y la construcción de la Vía Layetana

    Intervención en la Reforma

    Ha llegado el momento.

    En la primera sección de la Reforma están ya derribadas las casas viejas; van á comenzar las nuevas construcciones.

    El plano Baixeras sirvió perfectamente para plantear el problema, tramitar su resolución desde el punto de vista administrativo; pero suponer que en él se halla una solución acabada del mismo, fuera para Barcelona, si lo permitiera, una ignominia.

    Pasead por la calle recién abierta, entre las vallas de ladrillo de los solares; vuestro espíritu experimentará desagradables impresiones.

    Veréis que entre lo nuevo y lo viejo no existe relación alguna. Como si la vía se abriese en medio del campo, sus alineaciones nada tienen que ver con las calles vecinas; en lugar de enlazar francamente la una con las otras, se obstruye su comunicación violentamente.

    Artísticas construcciones, antiguos monumentos, venerables testimonios del pasado, inmediatos, próximos á la nueva calle que debieran animarla y embellecerla, son despreciados en absoluto: los unos permanecen sin alterar su actual defectuoso emplazamiento; otros quedarán ocultos tras nuevas construcciones; los hay que van á ser bárbaramente derribados.

    La Reforma tiene larga historia; el origen de tales desafueros se remonta lejos. Ejecutamos, con escrupulosa exactitud, lo que proyectó otra generación.

    Cincuenta, treinta años atrás, la reforma de poblaciones se entendía bien diferentemente que en la actualidad. El sistema lineal rectilíneo, el paralelismo, la perpendicularida, se consideraban lo más perfecto para el trazado de calles y plazas. Y se arrasaba la ciudad vieja para levantar sobre ella otra del todo diversa. Imperaban la uniformidad, los principios apriorísticos.

    Considerar la ciudad como un organismo vivo en que se deben respetar las corrientes de circulación de las multitudes y del tráfico industrial; ver en la ciudad un carácter, una fisonomía propia esencia de ella; saber su historia; he ahí las bases principales que tienen presentes los maestros urbanizadores modernos. Se procura hermanar el aspecto pintoresco, accidentado y monumental que presentan las ciudades antiguas, con cuanto requiere la higiene y las necesidades actuales de la circulación diaria y comunicaciones.

    Un grande arte, con sus obras, sus escuelas, sus profesores, su bibliografía, existe. Los nombres de Stüblen [sic], de Henrici, Sitte, Buls, son de los hombres eminentes que en primer término este arte han determinado en Alemania, Austria, Bélgica al principio, y en Italia, Inglaterra y Estados-Unidos después, se siguen las orientaciones por ellos señaladas.

    No hay derecho á ignorar, á prescindir de conocimientos de universal dominio. Barcelona, su municipio, sus facultativos, no pueden substraerse en cuestion tan importante como es la Reforma de la ciudad, á las corrientes actuales, á la evolución experimentada. Debemos adaptarnos al tiempo, á la hora presente.

    El plano Baixeras tiene que ser el fundamento de la Reforma; hay acuerdos, antecedentes, que á ello obligan; pero en detalle, su ejecución ha de venir influída, por las ideas dominantes que son un progreso, un perfeccionamiento. Sería bien triste que los hombres de hoy, las ideas de nuestro espíritu, las palpitaciones de nuestro ser, no influyesen en lo más mínimo en el trazado de la Reforma.

    La voz, las aspiraciones de la intelectualidad de Barcelona, respecto de esta cuestión, quizás no había llegado al Municipio hasta ahora con fuerza bastante para ser oída. Los arquitectos del Ayuntamiento y del Banco Hispano-Colonial se han limitado á derribar edificios; su talento, sus aptitudes, han de emplearse en más elevados fines.

    Pero llegado el momento crítico, van á comenzar las nuevas construcciones. En la ocasión de que cuantos en estas cosas entiendan, digan su palabra.

    Las corporaciones artísticas se dirigen al Ayuntamiento en razonado documento, clamando para que la Reforma se haga, no de un modo automático, sino conscientemente; para que se emplee bien el dinero, se embellezca la ciudad.

    Es de esperar serán atendidas.

    JERÓNIMO MARTORELL

  • El obispo Laguarda da gracias a Dios y a Manuel Girona por haberse acabado la reforma neogótica de la catedral

    Las fiestas Constantinianas en Barcelona
    En la Catedral

    Con gran solemnidad se celebraron en la Catedral los actos anunciados para [el] primer día del Triduo en conmemoración del XVI Centenario del edicto de Constantino.

    A las diez de la mañana empezó el oficio, en acción de gracias por la terminación de la fachada y del cimborio del templo.

    El capitán general, don Valeriano Weyler, que ostentaba la representación de S. M. el Rey, ocupó un sitial colocado bajo dosel en la parte derecha del presbiterio, acompañándole el gobernador civil, señor Sánchez Anido, el alcalde señor Collaso, con el teniente de alcalde señor Valles y Pujals y los concejales señores Carreras, Muntañola y Vallet.

    La cripta de Santa Eulalia se hallaba cubierta, situándose en la parte derecha de ella, don Manuel y doña Ana Girona, con todos sus hijos políticos y nietos. En la parte izquierda se hallaban el comandante de Marina, don Antonio Montis, el general gobernador señor Rodríguez y Sánchez Espinosa, el diputado provincial, don Pío Valls, el catedrático de la Universidad doctor Carreras, los generales con mando en esta plaza y varios cónsules.

    Entre los numerosos invitados que ocupaban el antecoro, figuraban los miembros de la Junta diocesana de Acción Católica, señores Albo (F.), Plá Deniel, de Riba, Nadal y Dalmases, y en el caro estaban el presidente de la Audiencia señor Serantes, el fiscal de S. M. señor Rives, el delegado de Hacienda señor Eulate, el catedrático de la universidad doctor Fábregas y el del Instituto General y técnico señor Brugada y representantes da muchas comunidadies religiosa y entidades católicas.

    El resto de los cruceros estaba totalmente ocupado por los fieles.

    El altar mayor presentaba el aspecto de las grandes fiestas, como las verjas del presbiterio y de la cripta de Santa Eulalia. De las galerías colgaban los tapices de las grandes solemnidades, estando el templo espléndidamente iluminado.

    A las diez empezó el oficio, que era de medio pontifical, siendo el celebrante el canónigo doctor Sánchez, asistido de los capitulares doctores Bruguera y Puig.

    El «Orfeó Cátala» cantó la gran misa del Papa Marcelo, de Palestrina.

    Terminado el Evangelio, el doctor Laguarda, que ocupaba su sitial frente al del representante de S. M. se dirigió al pulpito, con capa pluvial, mitra, y báculo y precedido del cabildo y clero catedral.

    El discurso del prelado, á pesar de hallarse éste convaleciente, fue elocuentísimo. Empezó saludando á S. M. el Rey que había querido asociarse á la solemnidad, dirigiéndole una expresiva carta en la gue se interesa vivamente por el bien moral y material de Barcelona y delegando su representación en persona tan ilustre corno el general Weyler, al que encargó transmitiera al Monarca la gratitud del prelado y de la Iglesia de Barcelona y los votos que hacía en este acto para que Dios le proteja en los días de su vida y sean éstos dilatados en bien de la Monarquía y de la Patria.

    Después de saludar y agradecer su asistencia á las autoridades y demás invitados, entró en la materia objeto de su discurso, que era la historia de la Catedral, perla, dijo, de la hermosa concha que se extiende desde el Tibidabo hasta el mar.

    «La diócesis de Barcelona ve en este templo algo así como la inspiración y manifestación de su alma, porque la diócesis de Barcelona ve en esas negras piedras y en esas columnas gue se levantan y en esas muros, algo más que piedras; esas piedras son verdaderos archivos de gloriosos recuerdos de la Iglesia y de la diócesis de Barcelona.

    Y porque la diócesis de Barcelona mira con veneración profunda y singular este templo, al ver para el frente del mismo una preciosa fachada y que después se levanta dirigiéndose al cielo un hermoso cimborio, prodigio de la arquitectura, y observa esto que hace veinticinco años no existía, rebosa de gratitud y agradecimiento.»

    Recuerda el prelado que el día de la Purísima del año 1886 hablaba precisamente desde aquel mismo púlpito el obispo don José [sic] Cátala, el cual había, recogido el alma de su pueblo, y expresaba el deseo que todos sentían de que la Catedral de Barcelona tuviera terminadas sus obras, especialmente de su fachada.

    Añadió que el deseo ha sido realizado, gra-cias á la munificencia de don Manuel Girona que se ofreció á costear la fachada. Con este motivo elogió á aquel patricio y á sus hijos, que han sabido imitar á su padre continuando su obra y costeando el cimborio.

    Hace al doctor Laguarda el historial del templo catedral desde el tiempo en que según tradición el apóstol Santiago predicara en este mismo montículo en que hoy se asienta.

    Hablando de la parte artística de éste:
    «Lo que dicen los templos ojivales, añade, está demostrado en éste. Mirad estas columnas, delgadas, finas y sólidas como el pensamiento que se levanta; mirad estos arcos apuntados; mirad esa luz que se filtra por los vidrios de colores; mirad las sombras de tristeza augusta de que están impregnadas las naves de este templo… todo habla de Dios, de la eternidad, del alma.»

    Señala la característica de nuestro templo Catedral, notable, no por sus adornos maravillosos, que no tiene, sino por la pureza de sus líneas incomparables, y felicita á los facultativos que han trabajado para completar dentro de su estilo propio la obra de la Basílica, señores Mestres y Font.

    Terminó el doctor Laguarda su hermoso discurso cantando un himno á la patria catalana y elogiando los sentimientos cristianos del pueblo de Barcelona.

    El doctor Laguarda, al acabar su discurso se sentía bastante fatigado, á causa de hallarse aún casi en la convalecencia.

    Después del sermón, el «Orfeó» cantó un Te-Deum. La función religiosa terminó á la una menos cuarto.

    En el palacio episcopal.—Banquete

    Terminados los oficios se reunieron las autoridades en el salón del trono del palacio episcopal, y en presencia de don Manuel y doña Ana Girona el canónigo doctor Faura leyó el texto de un pergamino que el cabildo entrega á los señores de Girona. En él está copiada el acta de la sesión del cabildo en que se acordó declarar bienhechores insignes á don Manuel y doña Ana Girona.

    Con tal motivo se cambiaron palabras de gratitud entre el prelado y el señor Girona.

    El prelado sentó á su mesa á las citadas autoridades. Una de las presidencias de la mesa la ocupaba el general Weyler, que tenía á su derecha á doña Ana Girona, viuda de Sanllehy; al presidente de la Audiencia, al delegado de Hacienda y al doctor Carulla, y á su izquierda al alcalde, presidente de la Diputación, deán doctor Almera y vicario general doctor Palmerola.

    La otra presidencia la ocupó el doctor Laguarda, que tenía á su derecha al gobernador civil, rector de la Universidad, señor Millán Astray [es decir el padre del Mutilado: le falta entrada Wiki] y presidente de la Junta diocesana señor Trías, y á su izquierda á don Manuel Girona, comandante de marina, fiscal de S. M. y capitán ayudante del general.

  • Marcha de reservistas franceses y alemanes para la guerra europea; para España, neutralidad y paz

    La estación de Francia continuó ofreciendo…, á la hora de salida de los trenes de la frontera, el mismo aspecto que los anteriores.

    En los trenes de las 5 y en los de las 12’32 y 14’23, marcharon bastantes franceses, poseídos todos ellos del mayor ardor bélico y del mayor entusiasmo patrio.

    Entre los que marcharon, los había de todas las clases sociales: desde el bracero que trabajaba en el túnel de Vallvidrera, hasta el comerciante ó el industrial que tienen establecido en Barcelona un importante negocio.

    Varios de ellos, con quienes conversamos en los andenes de la estación del paseo de la Aduana, nos manifestaron que en el Consulado se les ha participado á los que forman parte del ejército territorial, que deberán concentrarse en París para defender la capital y salir al encuentro de los alemanes, si éstos la amenazasen.

    Procedentes de Madrid, Valencia y otras poblaciones llegaron gran número de reservistas alemanes, que, junto con los residentes en esta capital, forman un contingente bastante numeroso, en espera de medios para poderse trasladar á su país.

    El gobernador y la prensa

    Convocada por el gobernador, se celebró ayer tarde una reunión de directores de periódicos diarios y de corresponsales, para tratar de la actual situación. El señor Andrade les hizo una detallada exposición del estado de Barcelona ante el actual conflicto, manifestando que no existían temores de que se planteara la crisis monetaria, pues se contaba con una cantidad de plata suficiente para atender á todas las contingencias; que probablemente no se presentaría tampoco el problema de la carestía de subsistencias, ni el de falta de carbón, y que, en una palabra, á pesar de la situación anormal por que atraviesa Europa, la de Barcelona podía considerarse satisfactoria.

    Añadió el señor Andrade que en interés de todos está el vencer las dificultades que pueden originarse de la situación bursátil y de la repercusión que pueda tener aquí el malestar general que se siente en los demás países, y apeló al patriotismo de todos para que presten su concurso á los poderes públicos, á fin de sortear los peligros de los momentos actuales, sin interés político ni de partido alguno, y sí sólo inspirándose en el binestar y las conveniencias del país.

    Los reunidos ofrecieron coadyuvar dentro de la esfera de su acción á cuanto contribuya á restablecer la tranquilidad y á asegurar la paz y el orden de Barcelona.

    El gobernador ha dirigido un atento besalamano á los directores de los diarios que en estos días exponen al público pizarras con noticias del conflicto europeo, rogándoles que las retiren á fin de evitar la formación de grupos y el peligro que podría ocasionar el apasionamiento de los ánimos.

    […]

    La alarma financiera

    Ayer mañana continuó en el Crédit Lyonnais la aglomeración de público que fue á retirar fondos, formándose una cola que en ciertos momentos llegó á la calle de Lancáster. El Crédit Lyonnais satisfizo todos los talones de cuenta corriente que se le presentaron, observándose que muchos de los saldos de cuentas corrientes que se retiraban eran ingresados en las cajas de alquiler que tiene este establecimiento bancario. A la una de la tarde se cerraron las operaciones para continuar hoy a las nueve.

    El director del Crédit Lyonnais, don Leoncio Cabrero, conferenció varias veces durante la mañana con el director de la Sucursal del Banco de España. Parece que ésta facilitará al Crédit los auxilios que de ella ha solicitado para hacer frente al conflicto en que le ha puesto el pánico que se ha desarrollado entre sus cuentacorrentistas…

    […]

    La vigilancia de los extranjeros

    En el Gobierno civil se ha recibido una Real orden del ministerio de la Gobernación, en la que se establecen disposiciones, un poco severas, sobre los viajeros extranjeros que lleguen á Barcelona y los que aquí fijen su residencia, para que los que carezcan de documentación y no cuenten con medios de vida conocidos sean sujetos á estrecha vigilancia.

    […]

    Repatriados

    Los trenes de la frontera francesa llegaron ayer abarrotados de españoles á los que les cogió en Francia la declaración de guerra. La mayoría son braceros agrícolas, de escasos recursos pecuniarios, habiendo sufrido algunos una verdadera odisea, pues estando bastante internados en Francia al ocurrir la paralización completa de todos los trabajos y la de los trenes, han tenido que recorrer largas distancias á pie para ganar la frontera.

    Como la mayoría son gente pobre, algunos llegaron aquí sin recursos y otros con billetes de grupo que no podían utilizar en determinados trenes, encontrándose muchos por este motivo en la imposibilidad de continuar al viaje hacia sus pueblos.

    Ello dio lugar anoche á varios incidentes que se solucionaron satisfactoriamente gracias á la generosidad y altruismo del Interventor del Estado, señor Pujol y del jefe de la estación, que ante la anormalidad de la situación, atendieron antes á sus buenos sentimientos que al rigorismo de las disposiciones.

    […]

    Según se nos dice, se han cometido algunos abusos con los infelices obreros que llegan de Francia, por parte de varios individuos que han tratado de cambiarles los francos en pesetas con un descuento enorme. La policía tuvo que intervenir en algunos casos, persiguiendo á los que trataban de explotar la precaria situación de aquéllos.

  • Batalla campal en un teatro barcelonés sobre la Primera Guerra Mundial, pero la guerra dice «Sí» a Barcelona

    RIOT OVER WAR IN SPAIN

    Crowd in Barcelona Theatre Fights and Policeman is Wounded

    MADRID, Nov. 15, (Dispatch to the London Morning Post).) – The friends of France in Barcelona organized an entertainment in a theatre in aid of Belgian families. On the appearance in the theatre of the British, French, and Belgian Consuls there was a loud cry of «Long life to the Allies!» One spectator, however, shouted, «Long life to Germany!»

    This caused a violent riot, and there were serious collisions between the parties, with the result that a policeman was severely wounded by a bullet and many persons were arrested.

  • 175 voluntarios catalanes constituirán la base de la Legión de Millán-Astray

    En el banderín de enganche de esta plaza, se han alistado hasta ahora 182 individuos para el tercio de extranjeros. Entre ellos figuran tres argentinos, un argelino y un marroquí.

    En breve marcharán a su destino.

  • Einstein, probablemente con su cepillo, visita a la CNT

    VISITA AL SINDICATO DE LA DISTRIBUCION

    Por la noche, el profesor Einstein visitó el domicilio del Sindicato único de la Distribución.

    Acudió a este Sindicato a petición de los elementos que lo integran, quienes le dijeron que le admiraban desde que se negó a firmar el manifiesto de los 93.

    Durante la visita, Angel Pestaña informó al profesor Einstein de lo que había sido la represión emprendida contra los elemento sindicalistas, y éste ocupó la tribuna, y dijo:

    «Yo también soy un revolucionario, si bien científico, y he seguido con atención todas las cuestiones sociales. Esa represión de que me habláis me parece que contiene, quizá, más estupidez que maldad. Vosotros solamente hacéis resaltar las cosas malas; pero también hay cosas buenas en el régimen actual, según he buscado y he encontrado en Spinoza.»

    Bajó de la tribuna el profesor Einstein y conversó largo rato con algunos sindicalistas, que le hicieron un relato más extenso de tal represión, y el sabio profesor, después de extrañar la enorme proporción de analfabetismo en España, sólo comparable con la de Rusia, se dispuso a marchar, despidiéndose con las siguientes palabras:

    «Que en la próxima lucha tengáis más suerte y un éxito completo.»

  • Los colombófilos se pronuncian a favor de la dictadura

    Un homenaje

    En la Real Sociedad Colombófila de Cataluña se efectuó ayer un banquete en celebración de la fiesta onomástica del excelentísimo señor, don Miguel Primo de Rivera.

    Brindaron el presidente de la Sociedad y el Excmo. señor capitán general de Cataluña, acordando dirigir al presidente del Directorio militar una carta, de la que es el siguiente párrafo:

    «En el acto del brindis, que con unción patriótica ha pronunciado el presidente de la Sociedad, los comensales, puestos en pie, han levantado su copa, entre aclamaciones por España, por nuestro augusto Monarca, y por el hombre cumbre que con su inteligencia y férrea voluntad, es el más firme sostén de la patria.

    Con nuestra felicitación, reciba V. E. el testimonio del más sincero respeto y afecto y la más inquebrantable adhesión.

    Emilio Barrera, Carlos de Lossada, Maximiliano Soler, Plácido Pereyra, Diego de la Llave, Joaquín Echagüe, P. de Plandolit, José María de Delás, Dr. Antonio Quiroga, José Reynals.»