Etiqueta: Napoleón Bonaparte

  • María Antonieta de Nápoles casi se desmaya al ver lo feo que es su futuro esposo, Fernando de Borbón

    «Bajo de la carroza y veo el Príncipe: creí desmayarme: después del retrato que era más feo que guapo, pues bien, era un Adonis; estaba turbado. Os debéis acordar de que San Teodoro había escrito que era un guapo muchacho, con mucho espíritu y amable. Cuando uno está prevenido, encuentra el mal menor: pero yo que creía esto, me quedé muy asustada al ver todo lo contrario… Poco después fuimos conducidos a nuestro cuarto, y yo me puse a llorar: lo que duró toda la noche; maldiciendo el momento que me había hecho consentir en semejante cosa y la persona que me había engañado; pero el mal estaba hecho: no había ningún remedio.» en el mismo sentido con que escribía al archiduque Fernando había escrito la Princesa a su madre. En una carta de 17 de octubre María Carolina decía al marqués de Gallo: «El marido es horrible de rostro, con una voz que da miedo, y un completo bobalicón.»

  • Se recibe a Manuel Godoy con más extravagancia que a Carlos IV

    The king’s visit to Barcelona last year (1802) when the double marriage took place, is still the subject of conversation. The grandest scene on this occasion was, the three nights’ procession representing the blessings of peace, and the ancient triumphs of Spanish history, particularly the eastern expeditions of the Catalans and Arragonese in the fourteenth century. The dresses are said to have been very splendid; but judging by the prints which are now sold, not much taste was displayed in the machines and decorations made use of in this festival. To discharge the expense, the town was laid under a contribution; an English merchant told us that his share amounted to seventy pounds. The king was a month on his road from Madrid, through Sarragosa, and his retinue was like an army: upwards of eighty thousand persons, exclusive of the inhabitants of the city, were collected; and the Catalans felt a generous pride in observing that no accident or quarrel occurred, and no life was lost, notwithstanding the enmity subsisting between them and the Spaniards. This enmity is carried to such a height, that, when it was proposed to strike a medal in honour of the king’s visit, the academy of arts of St. Fernando, at Madrid, were requested to superintend the execution; but this body actuated by a most illiberal and unworthy spirit, endeavoured to excuse themselves, and made every possible delay; which so enraged the Catalans, that they withdrew the business from their hands, and entrusted it to their own academy. The medal was produced in a month, and remains a record rather of their loyal zeal, than of their ability in the fine arts. The Prince of the Peace [Godoy] appeared here in greater state than the king himself; he was lodged in the palace of commerce, and had a guard of honour daily mounted before his door.

    [Undated]

  • Desde Barcelona se devuelve Luisiana a Francia

    The royal order from the king of Spain for the delivery to France, was issued at Barcelona, October 15, 1802. It directs the delivery to be made to general Victor or other officer authorised by the French republic; and he is to be put in possession of «the colony of Louisiana and its dependencies, as also of the city and island of New Orleans, with the same extent that it now has, that if, had in the hands of France when she ceded it to my royal crown, and such as it ought to be after the treaties, &c.»

  • Los franceses toman la ciudadela por sorpresa

    Dia 29 Lunes de carnaval.

    Esta mañana á eso de las 11½ se ha executado en la esplanada como en los demas dias el exercicio, o revista por las tropas francesas en cuyo acto habia bastante gente que admiraba la gallardia de la tropa y lo pronto de sus evoluciones.

    Durante las mismas ha pasado hácia la Ciudadela la guardia francesa que debe relevar á la otra que hay en la puerta principal de la misma.

    A poco rato se ha visto pasar al General Lechi montado en un brioso y blanco caballo, y se dirigía con dos de sus Edecanes á dicha Ciudadela.

    Apenas Lechi ha entrado en ella se han visto desfilar hacia sus puertas toda la coluna que estaba en la esplanada lo que ha dexado parados á los espectadores.

    A la una dada se ha visto salir de la Ciudadela corriendo hácia palacio sin sombrero ni color en los labios, á su Gobernador D. Juan Viard de Jantilly, y como en seguida ha salido de la misma algun paysano por esto se ha sabido la fatalísima novedad de haberse los franceses apoderado de aquella importante Plaza con la mayor felonia, pues al estar la guardia francesa en aptitud de relevar á la otra de su misma nacion siendo ambas muy y muy superiores á la Española que habia no ha podido ésta impedir la entrada ni levantar su puente levadizo.

    Creyose á los principios el Gobernador que el General Lechi venia á hacerle la visita prometida pero quando ha visto tan numerosa coluna de Infantería ha quedado tan parado y fuera de sí que bazando corriendo de su casa, y presentado al mismo que estaba en la plaza, le ha dicho muy enojado: Esta es la visita que me habíais prometido? Y volviendo la espalda ha volado á comunicarlo al Capitan General Conde de Ezpeleta á quien ha hallado no peños confuso por tamaña novedad, que apenas creia y que preveía era imposible remediar teniendo los franceses tan formidable fortaleza con tan numerosa coluna veterana.

    En el interin que el Gobernador se hallaba en palacio se ha visto en la Ciudadela que á un golpe de caxa se han desprendido de la coluna formada en su plaza varias guardias que han ido á relevar las de los Españoles. A otro golpe de caxa se ha visto ponerse dos soldados con fusil frente cada una de las ventanas baxas de los pavellones, y de las puertas de los mismos, á fin de impedir que salieran o saltáran los moldados Españoles que estaban dentro. Es imposible pintar el furor y despecho de la Oficialidad y tropa, viendo tan pesada burla.

    No lo es menos describir la consternacion que al momento se ha difundido por Barcelona, de modo que en un cerrar y abrir de ojos se ha visto la esplanada y plaza de palacio llena de paisanage, y todos con sus semblantes muy coléricos y enojados. Han salido varios Regidores, y hasta el mismo Gobernador D. Cárlos de Witte para tranquilizar la gente y mandarla retirar á sus casas. Todas las calles desde la Platería á palacio, la plaza del Borne y sus inmediaciones, han cerrado las puertas, lo que acaba de infundir mas terror.

    La rabia ha subido de punto quando desde la misma plaza de palacio y muralla del mar, se ha observado á la una y media que otra columna francesa cubria el camino de Monjuich, llegando su vanguardia á su rastillo. Procuraban las patrullas y Autoridades dispersar y persuadir á la gente que retirasen, pero no habia forma de conseguirlo [Este chocante paso será el objeto de la primera lámina del primer quaderno de la coleccion colcográfica de los principales sucesos de Cataluña, que se está ya concluyendo.].

    Toda la tarde ha continuado la consternacion y rabia viendo perdida la Ciudadela y en víspera de perderse Monjuich, aunque á las cinco no habia entrado en él la tropa francesa. Con esto es facil conocer qual estaría Barcelona en esta tarde última de carnaval. Solo se conocia serlo no por las máscaras y bulla, sino por las 40 horas que segun estilo estan en aquellos tres dias en la Parroquial Iglesia de Santa María del Mar.

    Vense baxar y subir partes y contextaciones de Monjuich, pero su Gobernador interino el Brigadier D. Mariano Álvarez [El mismo que ocupará tan distinguida lugar en este Diario por la inmortal defensa de Gerona, que estuvo á su cargo.] no quiere ceder en abrirles las puertas. Témese una sangrienta jarana.

    El General frances que está apostado con un cuerpo de observacion en las casitas de San Beltran situadas en la falda de Monjuich, ha tenido la avilantez de abrir dos de los pliegos cerrados que el Señor Álvarez enviaba á nuestro Capitan General Conde de Ezpeleta.

    Vense salir al anochecer de las casas de sus alojamientos los Oficiales franceses, y trasladarse á los quarteles y Cindadela, sin duda para estar prontos desde dichos puntos á obrar en caso necesario, y que temen cercano atendida la fermentacion del Pueblo.

    Los Welites que desde el dia de su llegada estuvieron alojados en casas particulares, por considerarse á los individuos de aquel cuerpo como á otros tantos Oficiales, han salido á la misma hora de sus respectivos alojamientos, y quedan aquartelados en las Atarazanas.

    Esto, y el notar que todos los Generales ponen dobladas centinelas, no solo en las puertas de sus casas, sino tambien en las boca-calles inmediatas, hace ver el temor de nuestros huéspedes.

    Baxan los partes de resistencia á la entrega, la que creen los franceses no se verificará sino á la fuerza, y así es que han recogido quantas escalas habia en el convento de San Francisco de Asis, y otros parages para intentar el asalto. Aunque los políticos y militares se rien de tan débiles medios, pero lloran las desgracias que les serán consiguientes.

    Son las 10 de la noche, y todavía no han entrado los franceses en Monjuich, reparándose desde esta Ciudad las fogatas que hacen en sus inmediaciones para hacer los ranchos o calentarse.

    Hasta la misma hora queda todavía de planton el centinela avanzada del Castillo, despues de levantados los puentes á la una de la tarde. Dicho sereno centinela es de los voluntarios de Cataluña.

    A las 11 de la misma noche estando los terrados de las casas de Barcelona coronados de frenéticos espectadores, se ha visto al favor de las fogatas entrar en Monjuich las tropas francesas.

    Qual haya sido la sensacion que ha causado en Barcelona, qual el abatimiento y variedad de pareceres sobre la conducta de nuestro Capitan General Conde de Ezpeleta, se dexa todo para la Idea de mañana como á 1.° de mes.

  • Cataluña declarada dependencia del imperio francés

    Se han fixado por las plazas y esquinas de esta Capital unos grandes papelones en frances y catalan, anunciando la traslacion de Cataluña en Gobierno separado, pero dependiente del grande Imperio frances. Segun lo decretado por el Emperador Napoleon, Cataluña queda declarada en estado de sitio, y elegido Comandante General y Gobernador de la Provincia, el Mariscal Augereau, Duque de Castiglione.

  • Escrito del gobernador francés, Augereau, en catalán

    Se ha fixado por las plazas y esquinas de esta Capital una amorosa Proclama del Mariscal Augereau, dirigida á los Catalanes, para que dexen las armas de las manos. Está escrita en catalan; sin duda para mejor seducir á los patriotas de la montaña, ó, á quantos sencillos la oígan.

  • Los franceses obligan al Diario de Barcelona a publicar en catalán

    Empieza hoy el Diario en Catalan, y baxo nueva denominacion, pues hasta aquí habia conservado la misma que se le dió el año de 1789 (quando Mr. Husson de Lapasaran, fué su impresor), á saber: Diario de Barcelona: mas hoy empieza baxo el título de Diari de Barcelona y del Gobern de Catalunya… La relacion pues del Diario traducida del idioma Catalan al Castellano, para la universal inteligencia, dice así…

  • Los franceses tratan de seducir a los barceloneses con lengua trífida

    Se ha fixado por las plazas y esquinas de esta Capital, una Proclama del Mariscal Macdonald, fecha en Gerona á 23 de Mayo último. Es trilingüe, á saber, en Frances, Catalan y Castellano. Las gentes se agolpan en las esquinas al ver tan grandes papelones; pero quedan saciados al leer la primera cláusula, que dice: Buenos habitantes de Cataluña: pueblo activo, industrioso y valiente; á vosotros me dirijo; con vosotros hablo &c. Conoce ya demasiado el pueblo barcelonés el lenguage seductor de que usa el enemigo, y así, mirándose unos á otros los paisanos, señalando con el dedo la dicha Proclama, decian: lée el Sermon.

  • En el Diario de Barcelona el mariscal Macdonald habla español y los demás catalán y francés

    Léese en el Diario baxo el título de Noticias particulares de Barcelona, la arenga que hizo el Mariscal Macdonald en Gerona, ante la Junta que allí creó. Como dicho discurso es un continuado y auténtico testimonio del espíritu patriótico que anima á nuestra Provincia de Cataluña, por lo mismo lo continúo literal, pues que en Castellano se nos dá en el Diario, á pesar de ser todo lo demás (tiempo hace) en Frances y Catalan.

  • La política lingüística de los franceses

    Se ha publicado hoy el Diario en Castellano, cosa que no se habia notado desde que el Corregidor Pujol lo mandó publicar en Catalan. Y es muy para notarse, que empieza dicho Diario con un Decreto del Mariscal Macdonald, el qual nombrando Intendente de Barcelona á Mr. Luppé, y Secretario General de la Intendencia á Mr. Paris Laplaignes, hablando del mismo Pujol, dice: El Señor Pujol, Corregidor actual de Barcelona, queda reservado para otras funciones.

    Esta cláusula equivale á lo mismo que quedarse en la calle. Aseguran, que el Mariscal ha ofrecido á Pujol una plaza en la Audiencia, pero que aquel ha respondido, que no entendia de leyes. Lindo ascenso ha hecho nuestro Conciudadano Pujol, despues de tan decidido afecto á los franceses. Ciertamente no se creía tan desgraciado como Madinabeytia; pero ahora vé, que es su compañero en la paga que ambos han recibido de sus idolatrados franceses. Dicho Decreto del Mariscal Macdonald , puede verse en el número 6 del Apendice primero.

  • Por primera vez se ríe de la rogación por la lluvia

    This system [of pleas to heaven for rain] operated with no substantial changes, except during times of wars (sieges), when the ceremonies could not go outside the town itself. Problems appeared in the city following the French occupation during the Napoleonic Wars and the introduction of anticlerical and liberal concepts. On the 9th of April 1812, the first case of mocking of a public pro pluvia rogation was recorded. The record is critical of this mocking, but itself measures the effectiveness of the rogation by the use of a barometer: «It has rained this morning most abundantly, thanks be to God, in such a manner that the Barometer indicates Showers. In the afternooon, and prior to the Rogations, [the rain] has continued to fall lightly.» [Ms in UB, Raimundo Ferrer, «Barcelona Cautiva»]

  • Alegria y peleas al firmarse la retirada francesa

    [Firmado Habert, general de división y gobernador de Barcelona, y Debains, coronel jefe de estado mayor. Orden del día 26/4/1814:] A consecuencia del armisticio arriba expresado, todas las hostilidades cesarán desde hoy 26 de abril, entre las tropas que componen la guarnicion de Barcelona y de sus fuertes, y las tropas españolas ó inglesas que forman su bloqueo.

    A la noticia de tan interesante nueva suspendiéronse los trabajos, abrazáronse unos a unos á otros los habitantes de Barcelona, dando gritos de «¡viva España! ¡viva la paz!» y colmóse de vitores y obsequios á algunos militares españoles que se introdujeron en la ciudad. Tan súbito contacto entre individuos de uno y otro ejército, enemigos encarnizados pocos dias antes, debia producir lamentables consecuencias. Asi fué que á las pocas horas, un lance desagradable ocurrido entre oficiales franceses y españoles en un café, obligó á Habert á providenciar severamente que volviesen á su campamento acto continuo, y aun á alguno, para facilitar el mas cumplimiento de la órden, se le puso el caballo y el equipaje fuera del recinto. Los operarios que por cuenta del invasor trabajan en las fortificaciones, fueron despedidos aquel dia. Retiráronse acuadrillados por el Born, cantando, bailando, y vociferando contra los afrancesados, á uno de los cuales, el comisario de policia Pi, persiguieron á golpes.

  • Sale el ejército francés y entran elementos del hispano-británico, incluso el Héctor de San Andrés; linchamientos y detenciones de traidores como un cierto Pujol

    El 27 verificóse el relevo de todas las guardias de la ciudad y fuertes, en medio de un viento cual no habia memoria de otro tan espantoso, acompañado de espesa lluvia. El dia antes llegó á Habert una órden de Luis XVIII, para que á las 48 horas se hallase ya camino de la frontera. A las cinco y media de la madrugada del 28 acabó de desfilar por la puerta de D. Cárlos el ejército francés, no entregando su gefe hasta última hora los badajos de las campanas: tanto les tenia acobardados el tañido de las mismas. Un cañonazo disparado del fuerte de D. Cárlos anunció que acababa de salir el último soldado de la tropa invasora, y al punto se hizo salva real en las demás fortalezas.

    A las diez entró al frente de su brigada por la puerta Nueva el invicto Manso, yendo por el centro del paseo de S. Juan á guarnecer la Ciudadela, de la que era nombrado gobernador, y cuyo punto ocupaban ya desde las tres de la madrugada, en que entraron por la puerta del Socorro, algunas compañias de su mando. El pueblo le acompañó en triunfo, gritando con el mayor entusiasmo: «¡Viva D. José Manso!» Inútilmente se esforzaba el héroe catalan en suplicar que no se diesen mas vivas que á España y á Fernando: su nombre era tan grato como éstos al arrebatado y numeroso gentio que le rodeaba. A la misma hora entraron por la puerta de Santa Madrona las divisiones de Sarsfield y Llauder. Este último nombrado gobernador de Monjuich, subió al castillo despues de revistada la columna en la muralla del Mar y Rambla, en donde arengó Sarsfield á la tropa concediendo perdon á los desertores que se presentasen.

    Numerosas patrullas pasaron en seguida á prender á los que habian sido empleados de los enemigos. Adelantóse á ello el populacho, apedreando las casas de los afrancesados y á cuantos encontraba por las calles ó mal escondidos. Quiso guarecerse uno de ellos en una casa frente de la Aduana, donde protegiéndole un oficial español, fué conducido arrestado á la guardia de la puerta de Mar, en medio de afrontosos insultos. Sufriólos tambien en la Rambla D. Antonio Vago, tachado de amigo ó pariente de Godoy y ex-contador de ejército francés, el cual fué arrestado en el convento de la Trinidad. Capturóse tambien á un lego agustino, al verdugo y á dos paisanos, vulgarmente apellidada de los Jusepets, se presentaron de rejas á dentro, temerosos de mayor mal. Otros mas comprometidos habian intentado fugarse por mar, pero volviéndoles el huracan al puerto, acudió allá la multitud, y apelando á las piedras, descalabró á un ex-polizonte. Todavia fueron por la noche reducidos á prision los ex-adjuntos de la mereria D. José Pujol y D. N. Mercader, junto con los PP. Llosada y Malet. Posteriormente y en distintos puntos del principado, fuéronlo igualmente los intrusos canónigos Postius y Sopena, con otros varios.

  • Con 59 años, Madame Saqui, la funambulista favorita de Napoleón, da su primera exhibición en España en el teatro de la Santa Cruz

    Una célebre notabilidad, un fenómeno admirable y digno de llamar la atención del público, se presentó en la noche del lunes en el teatro de Santa Cruz. Mad. Saqui, esta muger estraordinari cuyo valor y audacia son conocidas en toda Europa; esta muger que atravesó el Sena sobre un alambre á presencia de Napoleon, y que como pocas en el mundo, ha arrostrado repetidas veces los peligros de varias ascensiones aerostáticas, cuando ya en su edad bastante adelantada debia descansar sobre los laureles de sus gloriosos triunfos, pisa ahora por primera vez el suelo español y vuelve á trabajar con el mismo prestigio, con igual fuerza, agilidad y firmeza que pudiera hacerlo en los primeros años de su agitada vida. Si no fuese sorprendente en alto grado el verla ejecutar sobre la maroma tirante y sin balancin las suertes mas dificiles y arriesgadas con una habilidad y soltura que tendrá pocas rivales; bastaria calcular los largos años de vida que en el dia cuenta Mad. Saqui para contemplarla asombrado como un portento de la naturaleza. Sube y baja desde el palco escénico a la cazuela con una serenidad que pasma y como si verificase la operacion mas sencilla é insignificante, hasta el punto que la autoridad ha tenido que prevenirla que no ejecutase algunas suertes que se habia propuesto hacer en el momento del descenso: sin embargo, cuando está debajo del gran quinqué se arrodilla y toma diferentes posiciones hasta sostenerse en equilibrio sobre la punta de un pie que apoya con firmeza sobre la cuerda.

  • Dia de Pascua de Pentecostés

    Hanos dado el acaso un vecino que se acuerda de la primera guerra con la Francia como si pasara hoy, que es como si dijéramos que no baja de sus 60 del pico: hombre aficionadísimo á la música, y que habla de la de su tiempo con el mismo entusiasmo que puede hacerlo un jóven postnapoleoniano de la de Rossini ó Bellini: pero no se crea que este buen anciano sea hombre de caudal: en la guerra que el vulgo de este pais llama de la pendencia (propiamente juega el vulgo del vocablo), sirvió y llegó á teniente: fue despues empleado, y por consecuencia precisa es en el dia cesante. Asi es que pocas veces ha podido satisfacer su aficion á la música sentado en una luneta del teatro, sino que en su juventud, las revistas, misas de tropa y retretas eran su ópera, como lo son en el dia los pianos de los cafés , las misas solemnes y los órganos de las iglesias. No falta todos los años al oficio de la catedral en el dia de Navidad, ni al de Sta. María del mar en el de año nuevo, ni al del Pino en el dia de Reyes, y sabe cual es el mejor órgano de la ciudad y qué organista es el que mejor teclea.

    Llega la pascua de Pentecostés, cuyas costumbres rezamos hoy, y madruga y se viste de punta en blanco sin olvidar el sinnúmero de cintajos que ganó en las campañas que hizo; y á las 9 de la mañana le hallarán Vds. de fijo sentado en uno de los bancos de la catedral para oir teclear el órgano al maestro D. Mateo Ferrer, á quien llama Mateuet, durante los maitines del día; pues si bien duran una hora, dejan suficiente lugar al organista para tocar á su sabor todas las teclas y todas las contras. Nuestro anciano filarmónico se entusiasma, porque ha contraido la costumbre de entusiasmarse todos los años en aquella funcion que llama la hora, y hace participar de su entusiasmo á los que tiene á su lado, que son otros tantos ejemplares de un tipo que se pierde en la confusion , indiferencia ó reformado gusto de este segundo tercio del siglo XIX.

    Hoy es fiesta de precepto, y la Iglesia la celebra con toda solemnidad.

    Las demás costumbres no ofrecen ninguna particularidad notable, y son otra edicion de las veraniegas que hemos descrito en el mes pasado.