Año: 1951

  • La Sexta Flota rescata a la prostitución de la penuria

    El 9 de enero de 1951 la Rambla ofrecía un aspecto inusual: era el pueblo barcelonés que, en masa, se dirigía al puerto para contemplar la llegada de los primeros navíos de la Sexta Flota americana. Los gorritos blancos tan característicos de los marines invadieron el Raval, la Rambla y la plaza Catalunya. De pronto, todo se convirtió en una fiesta. Fue el principio de un boom espectacular, fantástico: los marines yanquís hicieron furor en Barcelona.

    Las prostitutas creían estar asistiendo a un inesperado y maravilloso milagro. Las que iban por libre, lo más normal es que pidieran cinco dólares por ocupación, y eso significaba, pura y simplemente, nadar en la abundancia: todavía habían mujeres que sólo cobraban quince pesetas. Del pesado regateo, al cual estaban tan acostumbradas, se pasó al disfrute del dólar y a los estupendos regalos. Por las calles no se veían más que grupos de marines y prostitutas cogidos del brazo; entraban en una tienda y salían, ellas llenas de paquetes, ellos mostrando una sonrisa ingenua y complaciente.

    Los encargados de algunos mueblés admitían chicas menores de edad sin reparos cada vez que la escuadra americana fondeaba en Barcelona: en Habitaciones Aglá, calle Aglà número 9; en Habitaciones Vicente, Robador número 55… Se repartían tarjetas de propaganada de casas de prostitución, cuando éstas aún funcionaban legalmente. Hubo quien, bajo la aparencia de organizar un ballet artístico, se dedicaba a la recluta de chicas para presentarlas a los americanos. Todo el mundo se quería apuntar al carro de las ganancias, de una manera u otra…

  • Volante para la huelga de tranvías

    Barcelonés

    Si eres un buen CIUDADANO a partir del 1.º de Marzo y hasta que igualen las tarifas de la Compañía de Tranvías con la Capital de España, (0’40 ptas., según puedes leer en «LA VANGUARDIA» del día 28 – 1 – 51 pág. 3.ª, Crónica de Madrid)

    TRASLADATE A PIE a tus habituales ocupaciones. En tu propio beneficio y lo más rápidamente posible, haz cuatro copias de esta CADENA y mándalas a cuatro amigos distintos. Si quieres ser CIUDADANO DE HONOR, haz ocho copias o más.

    ¡ESPAÑA UNA Y PARA TODOS IGUAL!

  • Fangio, campeón del mundo para Alfa Romeo en el circuito de Pedralbes

    La settimana Incom 00664 del 01/11/1951
    Fangio campione del mondo a Barcellona.
    Descrizione sequenze:gli automobilisti sono accanto alle loro automobili e discutono con i sostenitori e i colleghi prima dell’inizio della corsa ; le automobili alla partenza ; fasi della corsa; alcune automobili sbandano urtando le staccionate ai bordi della pista ; pubblico segue la corsa dalla tribuna ; Rosier a bordo della sua automobile fa un testacoda ; Fangio tagli a per primo il traguardo ; Fangio festeggiato dopo la corsa:

  • La Vanguardia pide la libertad de crítica

    PIDE LIBERTAD PARA HACER CRÍTICA A JEFES ESPAÑOLES
    Barcelona, diciembre 27 (AFP)

    El diario barcelonés La Vanguardia publica un editorial titulado «Imperfecciones» en el que aboga por la libertad de crítica.

    El diario considera como una «evidente deserción» el no poder enjuiciar las muchas cuestiones y materias que requieren «la crítica correcta, documentada y colaboradora».

    Afirma La Vanguardia que es notorio que durante muchos años se ha prolongado, por imperativo de las circunstancias, la atrofia de la crítica periodística, «con la consiguiente comodidad para quienes, desde sus cargos y jerarquías, se encontraban a cubierto de cualquier censura». Las gentes que entienden las cosas así –sigue diciendo el editorialista– «se han acostumbrado a la comodidad de su incomparencia ante la conciencia pública, que no otra cosa es la prensa, ante cuyas críticas, lejos de arrojar la cara, que es lo que importa según el clásico y no el espejo periodístico, se revuelven airados, clamando su noli me tangere, investidos de una presunta y caprichosa irresponsibilidad que no sabemos de dónde ha salido».

    «Nuestro régimen –prosigue La Vanguardia— no solamente no es perfecto, sino que está lleno de imperfecciones, como todo lo humano. Ha llegado la hora de decir, proclamándolo a los cuatros vientos con la palpitante elocuencia de un axioma, que lo único que en nuestro régimen puede ser considerado perfecto es el Jefe del Estado…»