De un niño tenido por muerto, restituydo a vida. Milagro 277.
A Ocho de Hebrero del año mil y quinientos cinquenta y quatro, vino aesta sancta casa, Francesch Torrelles, con su muger de la parrochia de Sarria, enel obispado de Barcelona, y affirmaron con juramento, que un hijo suyo siendo de edad de un año, estando jugando encima dela cama, con un pedaço de caña que tenia en la mano, cayo y se le atravesso la caña por la boca y garganta passando dela una parte ala otra y por el dolor grande en tan tierna edad, murio, con gran lastima y tristeza de sus padres, culpando su negligencia, y que por tan desastrado caso huviessen perdido su hijo y confiados dela poderosa mano del Señor con muchas lagrimas y oraciones invocando la intercession y favor de nuestra Señora de Montserrate, rescibieron luego vivo al que lloravan ya muerto, convertiendo su tristeza en doblado plazer. Testigos fueron fray Pedro dela Rea, y fray Pedro Lopez donados desta sancta casa.
Pedro Alfonso de Burgos, Libro de la Historia y Milagros, hechos a invocacion de nuestra Señora de Montserrate (1594).