Á 19 de Septiembre llegó la princesa de Mantua con muchas galeras: hera parienta mui cercana del Rey nuestro señor, y S. M. la llamava para gobernadora de Portugal: ospedóla el de Santa Coloma, por ausencia del de Cardona, virrey; agasajóla y fuela sirviendo asta Madrid, mui á su costa. La ciudad de Barcelona hizo entrada con muchas luminarias y carnestolendas, como acostumbra; pero mostró estimarlo poco, pues se partió en medio de las fiestas. Era señora ya de algunos años y muy fea.
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El ayuntamiento organiza por primera vez celebraciones para la festividad de la Virgen de la Merced, y para Amadeo I; primera mención de los castells en la prensa – un tres de nou (?) de los Xiquets de Valls
Programa general de las ferias, exposiciones y fiestas populares de Barcelona que empezarán el dia 24 de setiembre festividad de la virgen de las mercedes y terminarán el 1.º de octubre del presente año 1871.
Exposicion general de las cuatro provincias catalanas; Feria y exposicion de ganado; Gran feria mercantil y artística; Carrera de caballos que se celebrará en el gran Hipódromo del Campo de Marte, adjudicándose varios premios á los caballos mas veloces; Exposicion de uvas; Gran solemnidad literaria; Exposicion permanente de pintura; Magnificas galerias de pintura y ricas colecciones numismáticas; Gran festival y certámen entre músicas militares; Grandes conciertos selectos en el gran Teatro del Liceo; Regata marítima; Premio á la natacion; Juegos de sortija en el Hipódromo; Gran fiesta marítima; Cucaña marítima; Gran castillo de fuegos artificiales; Simulacro de extincion de incendios; Grandes ejercicios ecuestres y acrobáticos; Árboles de cucaña; Grandes corridas de toros.
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¿Primera carrera de automóviles en España?
CARRERAS DE VELOCÍPEDOS
Se celebrarán mañana, 24 de septiembre en el paseo de coches del Parque de esta capital, á las nueve.
1.ª Carrera.—«Juniors» (3 vueltas).—Premio: 1.°, una medalla de plata dorada; 2.°, id.id. de plata; 3.°, id. id. de cobre (concedida por Los Deportes).
2.ª Carrera. — «Nacional Profesional» (5 vueltas).—Premio: 1.°, 150 pesetas; 2.°. 100; 3.°,75.
3.ª Carrera,—«Nacional-Amateurs» (4 vueltas).—Premio: 1.°, un magnífico objeto de arte (donativo del Alcalde); 2.°, un jarrón de fayance (de don Francisco Aurígemma); 3.°, un alfiler de corbata, de Toledo, incrustado en oro (de don Manuel Beristain).
4.ª Carrera.—«Máquinas múltiples» (6 vueltas). — Premios: 1.°, 75 pesetas; 2.°, 50; 3.°. 25.
5.ª Carrera. — «Motociclos» (6 vueltas).— Premios: 1.°, una escultura de fayance representando un ciclista (de don Jaime Farigola) 2.°, un jarrón fayance (de don Francisco Aurígemma).
6.a Carrera.—«Coches automóviles» (6 vueltas). —Premio: 1.°, una escultura de bronce representando un ciclista con su bicicleta (de los señores Vives y C.ª); 2.°, un objeto de arte (de los señores Comas y C.ª).Jurado
Presidente honorario: don Claudio de Rialp.—Presidente efectivo: don Manuel Duran y Ventosa.— Vicepresidente 1.°: don Santiago Tos.—Vicepresidente 2.°: don Juan Iglesias. —Juez de salida: don Guillermo Green.—Juez de llegada: don Joaquín Bordóns.—Contador de vueltas: don Enrique Pujó.—Jefe de comisarios: don Delmiro Tutain.Comisarios de pista.—Don José Elías Juncosa, don Francisco Nohet, don Arturo Toutain, don Andrés del Corral, don B. Maristany, don J. Cabrer, don J. Macaya y don L. Cuadrillero.
Observaciones 1.ª Las carreras se regirán por el Regla-mento de U. V. E.
2.ª La admisión de inscripciones terminará el 23, sábado, á las nueve de la noche, y deberán hacerse en el establecimiento de los señores Pujó Hermanos, calle Diputación, 253, esquina Universidad, siendo las cuotas para las matrículas 2 pesetas por carrera. La inscripción para las carreras de motociclos y automóviles será gratuita.
3.ª Las decisiones del jurado serán indiscutibles é inapelables.
4.ª El Jurado se reserva el derecho de alterar el orden en que deben verificarse las carreras, si así lo estimase conveniente.
5.ª El Jurado podrá no admitir á todo corredor que no juzgue digno de presentarse ante el público.
6.ª Si por el mal tiempo ó causas agenas á la voluntad de la Comisión, se suspendieran las carreras, los corredores no tendrán derecho á reclamar indemnización alguna. -
Una señorita entrega las joyas del tesoro de la Merced a un consejero de Esquerra para salvar del FAI la imagen de la Virgen
Los días 19 y 20 de julio de aquel año las turbas incendiaron la basílica de Merced, hecho que repitieron en días sucesivos. La imagen de la Virgen fue arrojada de su trono del camarín y quedó en el suelo del presbiterio.
El reverendo Luis Pelegrí Nicolau, presbítero beneficiado de la parroquia de San Miguel y de la Virgen de la Merced, enterado de la situación de la imagen, se puso en contacto con la familia Coll Muñarch, feligreses de la Merced, que vivían en la calle Ancha número 29 y tenían relación de amistad con el consejero de gobernación de la Generalidad de Cataluña don José María España Sirat, cuya biografía ha escrito en 1997 Albert Manent.
Los Coll Muñarch se encontraban ya sin cabeza de familia, pues el padre, notorio por su ideas religiosas y tradicionalistas, tratando de escapar a la persecución religiosa, había huido a Ciutadilla; pero allí fue detenido por el comité local; conducido a Barcelona, encarcelado en la sede del PSUC del hotel Colón de la plaza Cataluña, finalmente fusilado en la avenida de Montserrat por una patrulla de milicianos y rematado con el tiro de gracia que le disparó un muchacho de diecisiete años.
Teresa Coll Muñarch, que contaba veintidós años de edad en 1936, fue informada por mosén Luis Pelegrí del estado del interior de la destrozada basílica, así como de la existencia de las joyas de la Virgen. Teresa Coll se entrevistó con el consejero España y le comunicó que detrás del camarín de la Merced había una caja fuerte con las joyas del tesoro de la Virgen, que los revolucionarios anarcosindicalistas de la FAI no habían querido forzar, creyendo que el párroco había colocado dentro una bomba. Teresa sugirió al consejero España que, a cambio de las joyas, se pudiera salvar la sagrada imagen. Aceptó la proposición el Consejero y, como consecuencia de ello, más o menos a las cuatro de la tarde de martes 27 de agosto de 1936, un grupo compuesto por dos carabineros, dos guardias civiles, dos guardias de asalto, tres agentes escoltas de la confianza del Consejero, un cerrajero y la señorita Teresa Coll Muñarch salió de la consejería de Gobernación, o sea de la actual delegación del Gobierno, antes Gobierno civil en la avenida del Marqués de la Argentera, y se dirigió en una camioneta descubierta a la basílica de la Merced. El grupo fue observado continuamente por elementos armados de la FAI que, al ver a los agentes de orden público, permanecieron prudentemente alejados.
Penetró el grupo en la iglesia y, habiendo subido al camarín, el cerrajero procedió a perforar la caja fuerte con un soplete. Hallaron las joyas que Teresa Coll retiró con sus manos a través del orificio practicado por el cerrajero. Acto seguido iniciaron el descenso, pero al pasar frente a la imagen de la Virgen, tirada en el suelo del presbiterio al lado del Evangelio, la señorita Coll sugirió que aquella imagen del siglo XIV tenía un gran valor artístico y que debían llevarla igualmente. El cerrajero y uno de los guardaespaldas del Consejero la llevaron a la camioneta descubierta, donde Teresa Coll la tapó con una sábana y una manta que había cogido en su casa con este propósito.
La camioneta desde la basílica incendiada se dirigió a la puerta principal de Capitanía, con los guardias civiles subidos a los estribos para atemorizar a los de la FAI, y fue desde la plaza de la Merced a Capitanía y, en el patio de honor, entonces abandonado y vacío, descargaron la imagen y la situaron en el cuarto de los trastos de limpieza, debajo de la escalera principal, donde estaba también el sarcófago de santa María de Cervelló, extraído previamente, bajo la custodia del conserje de Capitanía. Inmediatamente el grupo fue a la consejería de Gobernación a depositar las joyas del tesoro de la Virgen hasta la mañana siguiente, en que las llevaron al palacio de la Generalidad donde fueron entregadas. Terminada la contienda las joyas, que fueron convenientemente inventariadas, fueron devueltas a la iglesia.
La imagen de la Virgen permaneció en Capitanía hasta el 28 de septiembre de 1936 en que fue llevada al museo de arte del palacio nacional de Montjuïc hasta 1939, cuando fue restituida a la basílica y reanudado su culto hasta hoy después de ser restaurada por Feliciano Veciana de Barcelona.
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Dalí pide una arquitectura «blanda y peluda» durante una conferencia sobre Gaudí en el Parque Güell
«El Generalísimo Franco —dijo— es el mejor jefe de Estado que existe en Europa»
Con una asistencia de público muy numerosa, tanto que puede cifrarse en varios millares de personas, el pintor don Salvador Dalí pronunció su anunciada conferencia, dentro del programa de las Fiestas de la Merced, en beneficio de las obras del templo expiatorio de la Sagrada Familia.
La sesión, que debía iniciarse a las siete y media de la tarde, comenzó con treinta minutos de retraso. En primer lugar, los famosos «Xiquets de Valls» intentaron levantar una torre humana de seis pisos, pero cuando ya estaban a punto d« conseguirlo, una nube de humo muy denso —preparada por Dalí para hacer su aparición— cegó a algunos de los muchachos de la «colla», produciendo la calda, sin consecuencias, de la torre. Un segundo intento se vio coronado por el éxito y cuando e1 público aplaudió la exhibición hizo acto de presencia don Salvador Dali, acompañado de su esposa Gala.
El conferenciante, que fue presentado por don Federico Gallo, pasó a ocupar un pequeño palco, desde el que se domina la terraza superior del Parque y, sentando en un sillón gaudiniano a Gala, inició, de pie, su disertación con un saludo a los «Xiquets de Valls». «Xiquets de Valls» —dijo—, vosotros sois como Egipto, pero como un Egipto al reyes. Egipto elevó pirámides de piedra muerta a la muerte. Y vosotros elevéis pirámides vivas al cielo vivo de la mística española». Y, después de señalar e1 paralelismo entre las torres humanas de los «Xiquets» y las torres gaudinianas, dijo: «El pintor Mariano Fortuny es un genio; yo, también. El arquitecto Antonio Gaudí es un genio; yo, también. Prim, Fortuny y Gaudí son de Reus; yo, también. Yo también porque, como escribió otro también genial filósofo, Francisco Pujols, en nuestro pais hay gente que sin ser de Reus, casi lo parecen.
Seguidamente, Dali exaltó los valores espirituales hispanos. Como escribió Eugenio Montes, citó, en los momentos actuales ée terrible decadencia moral, ser español es una de las cosas que aún se puede ser. Y ser de Reus, añadió, quiere decir ser español y, por tanto, genial. Los de Reus, los de Figueras, los de Port ligat, los de Málaga, los de Sevilla y los de El Escorial, por ser españoles son geniales porque todos, unos sobre los hombros de los otros, formamos una torre mística, esa torre de sangre nobilísima que constituye la unidad española.
A continuación, Dalí pasó a analizar la obra gaudiniána. Gaudi, dijo, descubrió la inteligencia angélica, es decir, la posibilidad de ver las cosas en el espacio sin necesidad de un plano. Y asi Gaudi no necesitó plano para levantar una catedral. Frente a la arquitectura angélica gaudiniana, Dalí opuso la baja calidad de la arquitectura funcional — que no funciona — descubierta por Le Corbusier, a quien el mismo conferenciante afirmó haber dicho en 1928 que la arquitectura del futuro tendría que ser lo contrario de lo funcional, es decir, gaudiniana, o sea, blanda y peluda. La arquitectura blanda la aportó Gaudi y él, Dali, está llamado para aportar la arquitectura peluda.
Pasó después a tratar lo que calificó de «cuestión del alquitrán».
He descubierto — dijo — qus las formas de este material, surrealista por excelencia, son propias de la viscosidad del subconsciente humano. Trató también del «sentido áureo místico helicoidal», de las formas gaudinianas, propias de un temperamento genial español. Cuando un español sala genial, dijo, no se le puede comparar con nada. Pero los españoles somos sólo sordos con los nuestros. Velázquez fué un genio español. Y Gaudí, después, fué otro genio también español. Y ahora, el Generalísimo Franco es el mejor Jefe de Estado que existe en Europa. Estos son los hombres que da España.
Después, Dalí se refirió a la importancia cósmica de Gaudí y a la explosión espiritual, creadora y morfológica de sus obras. Esta explosión que ha despertado al mundo artístico no ha despertado sin embargo, a muchos barceloneses, que ni tan siquiera se han preocupado de visitar la exposición de Gaudi que actualmente se exhibe en el Tinell. Y para terminar su disertación, animada con continuos aplausos del público, Dalí refirió como en su época de estudiante logró un primer premio en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando sin pasar el pincel por el lienzo disparando desde un metro de distancia pegotes de pintura hasta componer un desnudo femenino que mereció el premio del jurado. Con ello se pretendió que el «divisionismo» o «quántiismo» era daliniano, lo cual no es cierto, afirmó. Lo que sí juzgó como daliniano es la cuestión del alquitrán y de sus formas. Hago una profecía y doy mi palabra de honor de español acerca de su cumplimiento. La profecía es, dijo, que es imposible acabar la Sagrada Familia sin seguir las pautas viscosas y helicoidales del alquitrán.
Concluidas sus palabras, y entre continuos aplausos, Dalí pasó a un gran estrado sobre el que se había instalado un lienzo de seis metros de alto por cinco de ancho y con una gran brocha fue trazando sobre el lienzo, apoyado en el estrado, una gigantesca pintura. Cuando concluyó, y mientras sus ayudantes regaban con asfalto caliente algunas partes del lienzo, anunció por el micrófono el significado de su obra, plenamente adecuada con el impulso que movió a Gaudi a levantar el templo expiatorio de la Sagrada Familia.
Mientras una grua iba levantando el cuadro —en el que se entreveían las formas de las torres de la Sagrada Familia- por los altavoces fueron retransmitidas otras palabras de Dalí tomadas en cinta magnetofónica, entre las que destacaron tres nuevas profecías artísticas: Primera, que cuando se colapse la arquitectura funcional toda la nueva arquitectura del mundo partirá de Gaudi; segunda, que todo el arte moderno parecerá a menos de vivificarse con el impulso creador de Gaudí y, tercera, que España, único país donde la fe católica ha tenido un sentido militante, será el punto del renacimiento artístico gracias a las formas hiperbólicas del último gran místico de nuestro tiempo: Antonio Gaudi.
Levantado el cuadro definitivamente, y entre aplauso» del público —al que Dalí había prometido que no se aburriría «como en otras conferencias» — pasó el pintor de Cadaqués a contestar las primeras diez preguntas que le formularan, iniciándose un interesante coloquio en el que se trató de cosas tan dispares como Gaudí, la sardana, el alquitrán, los payasos, los pintores, loa bigotes dalinianos y los productos pitagóricos, concluyendo e1 coloquio pasadas las nueve de la noche. Un fuerte aplauso subrayó la sensacional conferencia, gran atracción de ios Fiestas de la Merced y generoso gesto del pintor Dalí al ofrecer toda la recaudación para la construcción del templo de la Sagrada Familia.
La conferencia, a la que asistieron muchos extranjeroa, fue retransmitida por varias emisoras barcelonesas y tomada en película para el NO-DO. Una nube de fotógrafos disparaba continuamente sus destellos.