Categoría: Presencia de la mujer en la fiesta de toros: desde sus origines a nuestros días

  • Debut de Las señoritas toreras Catalanas en la plaza de la Barceloneta

    A finales de siglo, año 1894, aparecen unas toreras que tuvieron un gran impacto: “Las Noyas” o sea “Las señoritas toreras Catalanas” que tuvieron un rotundo éxito en su carrera basado en dos pilares fundamentales: su buen hacer torero y el acertado lanzamiento que les hizo su apoderado, el periodista y empresario catalán Mariano Armengol, apodado “El Verduguillo”. El mismo era quien entrenaba a las muchachas que no sobrepasaban los 14 años, y logró formarlas bien, con técnica y profesionalidad, para que no hicieran nunca el ridículo. Debutaron en Barcelona en 1895 un 10 de marzo, en una plaza llena a rebosar, y lograron un extraordinario éxito. Ese año torearon al menos en 15 plazas de capitales importantes de España y lograron una gran fama. Las matadoras o figuras del grupo eran: Dolores Pretel “Lolita” y Angela Pagés “Angelita”. Las banderilleras eran: Encarnación Simó, Julia Carrasco, Isabel Jerro, María Pagés y María Mambea. Toreaban erales y utreros. Lolita y Angelita fueron dos toreras inteligentes, con técnica y valor que dominaban todas las suertes. Torearon 45 corridas en 1895 y 50 en 1896 en plazas completamente llenas siempre. En 1895 debutaron en Sevilla, un 9 de septiembre. Tenían 68 corridas firmadas en 1897 e hicieron campaña en América y Filipinas. Estuvieron toreando hasta 1902 que se separaron en dos grupos: Lolita con Herrerita y Angelita con Pepita, organizadas con sus respectivas cuadrillas. Incluso Lolita se pasó al rejoneo y se casó con el torero valenciano Eduardo Serrano “Gordat”. La prohibición del ministro de la Gobernación, Juan de La Cierva en 1908, durante el mandato de Antonio Maura, retiró a Las Noyas de la circulación.