Resultados de las primeras pruebas militares de la nueva pólvora blanca de Josep Roura i Estrada; por qué no se usó

En un periódico científico de [Barcelona] y en su número correspondiente al mes de julio de 1848 se lee lo siguiente: «Polvora-Roura. – Esta pólvora se presenta en granos como la pólvora comun susceptible de adquirir todas las graneaciones, de color blanco algo amarillento, muy combustible, poco higométrica, y dotada de una fuerza superior á la mejor inglesa, apenas deja residuo y este no ataca tanto á las armas como el que deja la comun; el residuo no es nada higrométrico y los productos de la descomposicion no ejercen mayor detrimento en las armas que los productos de la negra: los experimentos siguientes dan una idea de las mayores ventajas que presenta la nuevamente descubierta, sobre la comun.
Número 1. Fulminante; propia para pistones. Su preparacion es mas económica, fácil y menos peligrosa que la de Howard, advirtiendo ademas que sus componentes nada tienen de comun con los que entran en la de este.
Número 2. Propia para chispa, piston y toda otra clase de fuego y en la cual no figura ninguna de las materias que constituyen la comun.
Número 3. Adaptable á pison, mecha, lanza-fuego y fulmi-algodon.
Estopines. De una composicion singular, pues en nada se parece á la de los dichos de cebo y de comunicacion que usa la artillería, tanto de campaña como de plaza.
Lanza fuegos. Hechos con pólvora número 3, sin adicion de ninguna otra materia. Arden en el agua, como los que se usan en las piezas de campaña y en las de plaza cuando llueve. Los resultados de su combustion no despiden ningun mal olor.

[Pruebas de penetración]
Balas arrojadas en 4 de enero de 1848 en Atarazanas sobre resmas de papel.

Pólvora-Roura num. 3. Pólvora comun.
Tiro Adarmes Cuadernillos atravesados Adarmes Cuadernillos atravesados
1 4 87 4 21
2 2 1/2 64 4 1/2 25
3 2 62 5 36

Los ensayos que se hicieron con el graduador dieron iguales ventajosos resultados.

[Pruebas de alcance]
Balas arrojadas el dia 10 de enero de 1848 en el campo y sitio llamado de la Bota con morterete y cañon de á ocho.

Morterete

Pólvora-Roura num. 3. Pólvora comun.
Tiro Carga (onzas) Alcance (varas) Carga (onzas) Alcance (varas)
1 3 360 [no puede ser] 3 224
2 2 1/2 248 3 229
3 2 217 3 218
4 2 222 3 218

Cañon de á ocho
[los 2 pies se refieren al ángulo de elevación, y supongo que en la última regla deberían ser 4]

Pólvora-Roura. Pólvora comun.
Tiro Carga (libras) Alcance (varas) Carga (libras) Alcance (varas)
1 1 530 2 255
2 1 780 2 pies 1 1/2 725 2 pies
3 1 1052 2 pies 1 1/2 881 2 pies

Comentarios

2 respuestas a «Resultados de las primeras pruebas militares de la nueva pólvora blanca de Josep Roura i Estrada; por qué no se usó»

  1. Avatar de Alberto Pernales
    Alberto Pernales

    La misma obra cita más resultados (positivos) de pruebas sacados de la prensa local y nacional. El 19 de agosto [ref2679] escribe:

    Sentimos decir que el gobierno no ha tenido á bien resolver nada, acerca de tan importante asunto, y sentimos mas todavía el saber, segun noticias fidedignas, que los gobiernos de Inglaterra y de Francia se han apresurado á hacer proposiciones á nuestro distinguido paisano para adquirir tan ventajosa invencion se sus ventajas se demuestran efectivamente en los oportunos esperimentos. Los ingleses, no han hablado aun de cantidades, pero los francese ofrecen ya un millon de francos.

    No encuentro ninguna evidencia de esto, ni de las razones – aparte de las aspersiones catalanistas habituales – porque no la adoptó el ejército. Lo más probable me parece que el «descubrimiento» de Roura a mediados de 1846 no fue sino el mismo que hicieron tres químicos alemanes en 1845/1846 (Roura viajaba bastante y tenía buenos contactos en el extranjero ([ref3305])), es decir algodón pólvora, o sea nitrato de celulosa con un alto grado de nitrógeno. Como explica [ref2679], que lo fabrica en pólvora en julio de 1849, su sensibilidad lo hace muy peligroso, por lo cual se dejó en seguida de usar como explosivo en Francia, Inglaterra y Prusia. Como explica Emilio Pou (¿padre del epónimo constructor de faros?) de en el mismo artículo:

    El algodon-pólvora puede emplearse en las armas de fuego con muy buen resultado. No obstante, tiene el inconveniente de que llegándose á calentar el cañon por los frecuentes disparos con mas facilidad y frecuencia que con la pólvora ordinaria, se inflama en el momento de llegar al fondo de la recámar del arma, ocasionando explosiones irregulares. Esto, segun el estado actual de la ciencia, hace que sea poco á propósito para el uso de la guerra…

    Véase también [ref3306]:

    Había llegado el 22 de noviembre, y diez días después debía verificarse la partida suprema. Sólo restaba realizar un último gran paso, pero éste era un operativo delicado, peligroso, que exigía precauciones infinitas, y contra cuyo éxito el capitán Nicholl había hecho su tercera apuesta. Tratábase de cargar el columbiad introduciendo en él 400.000 libras de fulmicotón. Nicholl opinaba, tal vez con fundamento, que la manipulación de una cantidad tan formidable de piróxilo acarrearía graves catástrofes, y que esta masa eminentemente explosiva se inflamaría por sí misma bajo la presión del proyectil.

    Aumentaban la inminencia del peligro la indiscreción y ligereza de los americanos, que durante la guerra federal solían cargar sus bombas con el cigarro en la boca. Pero Barbicane esperaba salirse con la suya y no naufragar a la entrada del puerto. Escogió sus mejores operarios, les hizo trabajar bajo su propia inspección, no les perdió un momento de vista y, a fuerza de prudencia y precauciones, consiguió inclinar a su favor todas las probabilidades de éxito.

    Se guardó muy bien de mandar conducir todo el cargamento al recinto de Stone’s Hill. Lo hizo llegar poco a poco en cajones perfectamente cerrados. Las 400.000 libras de piróxilo se dividieron en paquetes de a 5.000 libras, lo que formaba 800 gruesos cartuchos elaborados con esmero por los más hábiles trabajadores de Pensacola. Cada cajón contenía 10 cartuchos y llegaban uno tras otro por el ferrocarril de Tampa; de este modo no había nunca a la vez en el recinto más de 5.000 libras de piróxilo. Cada cajón, al llegar, era descargado por operarios que andaban descalzos, y cada cartucho era transportado a la boca del columbiad, bajándolo al fondo por medio de grúas movidas a brazo. Se habían alejado todas las máquinas de vapor, y apagado todo fuego a dos millas a la redonda. Bastantes dificultades había en preservar aquellas cantidades de fulmicotón de los ardores del sol, aunque fuese en noviembre.

    Etcétera. Pero esto no cuadra con lo de que la pólvora de Roura no sea nada higrométrica.

  2. Avatar de admin
    admin

    MAKE THIS STORY OF FAILURE OF CATALAN SCIENCE OR GET RID OF IT – NOT AS GOOD AS SUBMARINE STORY ANYWAY

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